El escritor peruano, Mario Vargas, ha participado, en el día de ayer, en los Cursos de verano de El Escorial, organizados por la Universidad Complutense de Madrid.
El Premio Nobel de Literatura, animó, en su charla, a aquellos jóvenes con vocación de escritores a trabajar y a atreverse a publicar, pues aunque “siempre es difícil comenzar”,actualmente, las posibilidades para hacerlo son mayores que en el pasado.
“Hoy en día hay editoriales que están impacientes por encontrar nuevos autores interesantes que puedan llegar a un público”, ha dicho el escritor, protagonista de un diálogo con los estudiantes del curso “Vanguardias poéticas y artísticas latinoamericanas”.
En su intervención, Vargas Llosa, ha realizado un recorrido por las vanguardias poéticas de su país, disertando sobre la obra de escritores como César Moro, de quien ha destacado el poema “Carta de amor” como uno de los grandes poemas de amor de la historia; Carlos Germán Belli, cuya lírica ha descrito como “quejumbrosa”; o Javier Heraud, cuyo nombre ha quedado para la historia como una figura mítica tras su trágica muerte, a los 21 años, mientras huía de la policía junto a otros compañeros de su grupo guerrillero.
Por otro lado, al referirse a la polémica que, en los años 60 y 70, se dio en las letras peruanas, en torno a las corrientes poéticas hispánica e indigenista, el escritor ha expresado que de ambas tendencias surgieron grandes poetas, pero que se trató de una polémica más de “historiadores”; y en este sentido, ironizó, acerca del hecho de que uno de ellos, José Carlos Mariátegui, “el gran teórico del indigenismo”, “no vio un indio nunca”.