Relatos italianos

La iniquidad

Massimo Bontempelli

Hasta los dieciséis años y su primer suicidio, Santos no había tenido una idea y menos aún un sentimiento, así fuera confuso, de la desigualdad social...

Algunas indicaciones útiles a dos auténticos caballeros

Dino Buzzati

Un hombre de unos treinta y cinco años llamado Stefano Consonni, vestido con cierto atildamiento y con un paquetito blanco en la mano izquierda, al pasar a las diez de la noche del día 16 de enero por la vía Fiorenzuola, desierta a aquellas horas, oyó de repente a su alrededor un sonoro zumbido de moscones que parecían murmurar algo...

Campo de minas

Italo Calvino

—Minado —así había dicho el viejo haciendo girar una mano abierta delante de los ojos, como si limpiara un cristal empañado—. Todo por ahí, no se sabe bien dónde. Vinieron y minaron. Nosotros estábamos escondidos...

La calle Bellovesi

Massimo Bontempelli

Una vez, mientras estaba en la plataforma de un tranvía de Milán, un individuo con barba gris, sombrero verde y aspecto de calabrés, fijó sobre mí sus blancos ojos de poseído y me dijo...

Angustia en el cuartel

Italo Calvino

El mal le empezó así: ver el caballo frisón en la escalera, cargado de alambres afilados, y pensar que tenía un significado amenazador y alusivo a su futuro. Pero antes ya, más de una vez, había bastado para atormentarlo la vista de su catre de campaña...

Joven alma crédula

Massimo Bontempelli

René Clamart me confía a Minnie para que le haga compañía durante media hora en el Quai del Louvre. Yendo por el Quai del Louvre, Minnie, de repente, se aparta de mi lado y escapa; allí está: ha corrido a plantarse extasiada ante una cisterna cuadrada de cristal que se exhibe en el exterior de una tienda de artículos de pesca...

El tamborcillo sardo

Edmundo de Amicis

Durante la primera jornada de la batalla de Custozza, el 24 de julio de 1848, sesenta soldados de un regimiento de infantería de nuestro ejército, que habían sido enviados a una altura para ocupar cierta casa solitaria, se vieron de pronto asaltados por dos compañías de soldados austriacos...

Don Pietro

Cesare Pavese

En vez de eso encontré la casa iluminada y la mesa puesta en la sala, y mamá y don Pietro hablando de mí. Hacía quince años que no venía por casa y de momento no lo reconocí, pero él enseguida me habló de una tal Ninina, de quien parece que yo estaba enamorado en sus tiempos...

Noche de luna

Carlo Emilio Gadda

No parecía posible romper la maravillosa unidad de aquel conocer, la pureza silente y sorprendida de la común plegaria. Aquellas naturalezas cumplían enteramente y siempre según su ley, vivían agentes, en sí mismas, de una única ley: que es su única vida...

África

Massimo Bontempelli

"Nunca he tenido una verdadera inclinación por el homicidio. Hasta ahora no he asesinado más que a mi amigo Amílcar, aunque, tras de mucho pensarlo, me parece que no fue una mala idea. Esto sucedió hace muchos años en la ciudad de Casablanca..."

Alba entre las ramas desnudas

Italo Calvino

"Volvió a su casa, se metió entre las sábanas, muy despacio, junto a su mujer que hubiera seguido roncando aunque se acostara un caballo. Pero no conseguía conciliar el sueño: ¿qué sucedería si no se despertaba al alba y su mujer lo encontraba en la cama?..."

El halcón de Federigo

Giovanni Boccaccio

"Él, por muy extrema que fuese su pobreza, no se había percatado todavía de cuánto necesitaba las riquezas que había gastado desordenadamente; pero esta mañana, no encontrando nada con que poder honrar a la señora por amor de quien ya había honrado a infinitos hombres, se lo hizo ver..."

Algo había pasado

Dino Buzzati

"Qué extraño, pensé, que en tan solo unos kilómetros haya visto a tanta gente recibiendo una noticia inesperada… Al menos eso era lo que yo suponía. Ahora, vagamente sugestionado, escrutaba el campo, las carreteras, los pueblos, las granjas, lleno de inquietud y presentimientos..."

Despertar

Cesare Pavese

"Era una noche de junio, y la oscuridad palpitaba. Yo comparaba mi angustia con tamaña dulzura, y excavaba y volvía a excavar a cada paso en mi dolor como si todas las tinieblas estuvieran empapadas de él y bastase con avanzar para sentir su peso cada vez más intolerable..."

A mí qué me importa el carnaval

Alberto Moravia

"Al rato salgo de casa, sosteniéndome con una mano la máscara sobre la cara y palpando con la otra, bajo el chaquetón, el mango de un cuchillo que, quién sabe por qué, cuando estaba por salir, y tal vez sugestionado por mi máscara..."

El pequeño vigía lombardo

Edmundo de Amicis

"El oficial se quedó un poco pensativo, después se apeó del caballo, y dejando a los soldados allí vueltos hacia el enemigo, entró en la casa y subió hasta el tejado: no se veía más que un pedazo de campo. “Es menester subir sobre los árboles”, pensó el oficial; y bajó. Precisamente delante de la era se alzaba un fresno altísimo y flexible, cuya cumbre casi se mecía en las nubes. El oficial estuvo por momentos indeciso, mirando primero el árbol y luego a los soldados; de pronto preguntó al muchacho..."

El mendigo de almas

Giovanni Papini

"No bien estuve afuera, una frase imprevista se apoderó de mi mente -una frase que había escuchado repetir muchas veces y cuyo autor no recordaba. “Si un hombre cualquiera, incluso el más simple, supiese narrar su vida entera construiría una de las más grandes novelas que se hayan escrito nunca.”"

El cordel del dedo

Giovanni Boccaccio

El cordel del dedo es un cuento de Giovanni Boccaccio que narra la historia de un joven que se enamora de una mujer casada y le envía un regalo muy peculiar. ¿Quieres saber qué es y cómo reacciona ella? Descubre este relato lleno de humor, ironía y erotismo, que forma parte del famoso Decamerón, una obra maestra de la literatura universal. No te pierdas esta oportunidad de leer una joya del siglo XIV que sigue vigente y sorprendente hoy en día.

24 de marzo de 1958

Dino Buzzati

¿Qué pasaría si el fascismo volviera a tomar el poder en Italia? ¿Cómo sería la vida de los ciudadanos bajo un régimen totalitario que reprime la libertad, la cultura y la oposición? ¿Qué papel tendrían los intelectuales ante la historia? Estas son algunas de las preguntas que plantea el cuento de Dino Buzzati, uno de los grandes maestros de la literatura italiana del siglo XX. Con un estilo ágil, irónico y conmovedor, Buzzati nos ofrece una visión distópica de una realidad alternativa que podría haber sido. Un cuento que nos invita a reflexionar sobre el valor de la democracia y la responsabilidad de los escritores.

El hombre que se ha perdido a sí mismo

Giovanni Papini

"Miro…, remiro…, busco…, contemplo el espejo…, me asusto. Pero ¿dónde estoy, Dios mío? ¿Quién soy? ¿Cuál es mi cuerpo entre todos estos cuerpos iguales? ¡Yo ya no estoy! ¡Todos iguales, todos de la misma manera! ¿No seré capaz de encontrarme?"