Realismo Mágico

Cien años de soledad

Gabriel García Márquez

"Cien años de soledad", la obra maestra del renombrado escritor Gabriel García Márquez, es un viaje literario inigualable que cautiva y fascina desde la primera página hasta la última. Publicada por primera vez en 1967, esta novela ha dejado una huella imborrable en la literatura y se ha convertido en un hito del realismo mágico. La historia se desarrolla en el ficticio pueblo de Macondo y sigue a la familia Buendía a lo largo de varias generaciones. Desde el inicio, el lector se sumerge en un mundo mágico y surrealista donde la realidad se mezcla con lo fantástico. La prosa de García Márquez es rica y desbordante de imaginación, transportándonos a un universo donde las mariposas amarillas, los diluvios interminables y los personajes peculiares cobran vida. Uno de los aspectos más notables de esta obra es su capacidad para capturar la esencia de la historia de América Latina. A través de los ojos de los Buendía, García Márquez retrata la complejidad y la tragedia de un continente marcado por el…

Parábola del trueque

Juan José Arreola

Muy pronto aquellos lunares salieron a la cara de todas, como si entre las mujeres brotara una epidemia de herrumbre. Los maridos se ocultaron unos a otros las fallas de sus esposas, atormentándose en secreto con terribles sospechas acerca de su procedencia. Poco a poco salió a relucir la verdad, y cada quien supo que había recibido una mujer falsificada...

El ahogado más hermoso del mundo

Gabriel García Márquez

No tuvieron que limpiarle la cara para saber que era un muerto ajeno. El pueblo tenía apenas unas veinte casas de tablas, con patios de piedras sin flores, desperdigadas en el extremo de un cabo desértico...

Continuidad de los parques

Julio Cortázar

Había empezado a leer la novela unos días antes. La abandonó por negocios urgentes, volvió a abrirla cuando regresaba en tren a la finca; se dejaba interesar lentamente por la trama, por el dibujo de los personajes...
Mind your points, por John Gilbert

El guardagujas

Juan José Arreola

El forastero llegó sin aliento a la estación desierta. Su gran valija, que nadie quiso cargar, le había fatigado en extremo. Se enjugó el rostro con un pañuelo, y con la mano en visera miró los rieles que se perdían en el horizonte. Desalentado y pensativo consultó su reloj: la hora justa en que el tren debía partir...

Casa tomada

Julio Cortázar

Nos gustaba la casa porque aparte de espaciosa y antigua (hoy que las casas antiguas sucumben a la más ventajosa liquidación de sus materiales) guardaba los recuerdos de nuestros bisabuelos, el abuelo paterno, nuestros padres y toda la infancia...