La niña de los tres maridos
Fernán Caballero
Había un padre que tenía una hija muy hermosa, pero muy voluntariosa y terca. Se presentaron tres novios a cual más apuestos, que le pidieron su hija; él contestó que los tres tenían su beneplácito, y que preguntaría a su hija a cuál de ellos prefería...
La hormiguita
Fernán Caballero
Había vez y vez una hormiguita tan primorosa, tan concertada, tan hacendosa, que era un encanto. Un día que estaba barriendo la puerta de su casa, se halló un ochavito...
El lobo bobo y la zorra astuta
Fernán Caballero
"Accedió el lobo, y la zorra, en lugar de ir al bautismo, se metió en casa del lobo, se comió una buena parte de la miel, cogió nueces, avellanas, higos, peras, almendras y cuanto pudo rapiñar, y se fue al campo a comérselos alegremente con unos pastores, que en cambio le dieron leche y queso."
El Carlanco
Fernán Caballero
"Y cate usted ahí que llaman a la puerta, y que oyen una voz como la de un becerro, que dice: ¡Abrid, que soy el Carlanco! Que montes y peñas arranco."
El abeto
Hans Christian Andersen
"¡Ay!, ¿por qué no he de ser yo tan alto como los demás? —suspiraba el arbolillo—. Podría desplegar las ramas todo en derredor y mirar el ancho mundo desde la copa. Los pájaros harían sus nidos entre mis ramas, y cuando soplara el viento, podría mecerlas e inclinarlas con la distinción y elegancia de los otros."
El cascanueces y el rey de los ratones
E.T.A. Hoffmann
"Me dirijo a ti, amable lector u oyente, ya te llames Fritz, Theodor, Ernst, o como quieras llamarte, y te ruego que recuerdes con la mayor viveza posible tu última mesa de Navidad cubierta de bellos y multicolores regalos, así también podrás imaginarte cómo se quedaron estáticos y mudos los niños y cómo..."
El muñeco de nieve
Hans Christian Andersen
«No lo entiendo -dijo para sí el hombre de nieve-, pero tengo el presentimiento de que insinúa algo desagradable. Algo me dice que aquel que me miraba tan fijamente y se marchó, al que él llama Sol, no es un amigo de quien pueda fiarme».
La niña de los fósforos
Hans Christian Andersen
"Encendió la niña una tercera cerilla, y se encontró sentada debajo de un hermosísimo árbol de Navidad. Era aún más alto y más bonito que el que viera la última Nochebuena, a través de la puerta de cristales, en casa del rico comerciante."
Benibaire
Fernán Caballero
Había una vez tres cabritas muy pobrecitas, y la mayor dijo: -¿Qué haremos? La segunda contestó: -No lo sé. Y la tercera dijo:...
Bella Flor
Fernán Caballero
Había una vez un padre que tenía dos hijos; el mayor le tocó la suerte de soldado, y fue a América, donde estuvo muchos años. Cuando volvió, su padre había muerto, y su hermano disfrutaba del caudal y se había puesto muy rico. Fuese a casa de este, y le encontró bajando la escalera...
Pippi Calzaslargas
Astrid Lindgren
Pippilotta Delicatessa Windowshade Mackrelmint nació, con nueve años, en 1945. Huérfana de madre e hija del capitán de barco Efraín Calzaslargas, que fue el rey de los mares y hoy es el rey de los caníbales, Pippi es su hipocorístico. Pippilotta, según el rey, era un nombre demasiado largo. Si hubiera crecido, la habrían tachado de disfuncional, pero eso la trae sin cuidado. Por ahora, podemos llamarla anarcoinfantil. Y es que mientras que su padre recorre mundo, ella vive sola, o, más exactamente, vive con un caballo, un mono y ningún adulto a la vista, cosa que le otorga muchísima libertad. Ni siquiera tiene que ir al colegio, aunque alguna vez se persone por allí. Imaginativa (que nunca demasiado mentirosa), valiente (que no lianta, incivil o temeraria), incorruptible y leal, pero no siempre ecuánime, por fortuna Pippi es más fuerte que cualquier policía o bandido del mundo. Y, aunque tiene una pistola y una espada, suele administrar justicia con las manos. Porque siempre hay gente mala rondando por ahí, pero…
Peter Pan
James Matthew Barrie
Un clásico de todos los tiempos: la historia del niño que no quiere crecer ni hacerse mayor, pero busca en Wendy la madre que no tiene; con ella y con otros niños que viven en el hueco de los árboles del país de Nunca Jamás, viven multitud de aventuras, entre otras la batalla contra el capitán Garfio y su banda de piratas.
El resguardo
Olga Montes Barrios
Volanteo. Una mano en el timón, la otra acciona el mecanismo que hace girar las aspas. Vamos subiendo una loma. Por el retrovisor observo la expresión de los pasajeros (tres viejas gordas con bolsos y un gallo).
Los libros para niños que los niños no quieren leer
Carlos Ávila Villamar
Los padres no se han puesto a pensar en que los niños suelen leer por imitación de los adultos y no porque tengan libros enfrente
El principito
Antoine de Saint-Exupéry
Fábula mítica y relato filosófico que interroga acerca de la relación del ser humano con su prójimo y con el mundo, El Principito concentra, con maravillosa simplicidad, la constante reflexión de Saint-Exupéry sobre la amistad, el amor, la responsabilidad y el sentido de la vida. Viví así, solo, sin nadie con quien hablar verdaderamente, hasta que tuve una avería en el desierto del Sahara, hace seis años. Algo se había roto en mi motor. Y como no tenía conmigo ni mecánico ni pasajeros, me dispuse a realizar, solo, una reparación difícil. Era, para mí, cuestión de vida o muerte. Tenía agua apenas para ocho días. La primera noche dormí sobre la arena a mil millas de todatierra habitada. Estaba más aislado que un náufrago sobre una balsa en medio del océano. Imaginaos, pues, mi sorpresa cuando, al romper el día, me despertó una extraña vocecita que decía: -Por favor..., ¡dibújame un cordero! -¿Eh!? -Dibújame un cordero...