La planificación
Legna Rodríguez Iglesias
La muchacha manca se sentó frente a la computadora SAMSUNG y decidió que la encendería para ver si funcionaba. Era la cuarta noche del año y se sentía bastante incómoda…
El Escribano
Heriberto Machado Galiana
Al teniente Soto le decían Savimbi por ser más prieto que una noche bien oscura. Negrísimo, bajito, y se podría decir que delgado, aunque de músculos compactos y definidos.
La columna rota
Elaine Vilar Madruga
Aquella mañana, desperté convencida de que era igual a Frida Kahlo. Tenía sus mismos ojos bajo las pestañas indígenas. El mismo pelo, como un manto de la noche...
Errare
Alexander Machado Tineo
—¿Sabía la gacela del peligro? —Sabía. Sabía también de la sutileza del acecho, de la atención obligada y minuciosa a cualquier ruido extraño en la espesura, al cambio más imperceptible de los olores, al desplazarse sigiloso de las sombras.
Los puercos no vuelan
Nguyen Peña Puig
Finalmente solo puedes ir y sentarte atontado, totalmente noqueado, y esperar; como si estuvieses en una parada de autobús aguardando la muerte.
Incorpóreo
Zulema de la Rúa Fernández
"Los vecinos la miran alejarse, un leve suspiro en los labios, no se conforman con el hecho de que alguien tenga un amigo incorpóreo, quizá comparten la idea de que la amistad es un fenómeno de honestidad mutua, donde todos deben dar la cara."
Tu olfato te guiará
Ernesto Pérez Chang
"Ya comprendía Alicia por qué al preguntar por la clase del profesor Moisés, ninguno de los que estaban sentados a la entrada del edificio supo determinar a quién se refería él con ese nombre, y solo después de una descripción minuciosa del sujeto (gordo, viejo, detesta el sol, usa gafas verdes), dos estudiantes le indicaron “Ah, ¿te refieres al Cretino de Troya."
Cábalas y amuletos
Ariel Lunar
"Víctor no solo juega su dinero en el fútbol; Valenciano es su otra razón de vivir. Ha invertido mucho en medicinas, tratamientos, vísceras, boniato y gomas de bicicleta para hacer de su perro una máquina de multiplicar dinero, una máquina de matar."
Chanel y el rayo verde
Roy Jorge
Por fin estás aquí, arrodillada en la arena rugosa, sintiendo el agua fresca que a veces llega desde atrás y acaricia tus pies; él, frente a ti, de pie, con el sol moribundo alumbrándole el rostro y el bosquecito de casuarinas a sus espaldas; es el sitio ideal, según te lo indicó la cartomántica —que tú gustas nombrar pitonisa— para poner en marcha el sortilegio...
(Fragmento)
El dolor de quererte
Liany Vento García
—¿Sabe usted si alguien tenía razones para matarla? Santos hizo la pregunta mirando directamente a los ojos del muchacho. Sabía de la importancia que las expresiones tenían en estos casos de homicidio. Generalmente las personas dicen más con los ojos que con las palabras.
Naturaleza muerta en re menor
José Antonio Martínez Coronel
Quisiera decirlo, contar la historia múltiple de mi familia, a ver si nos vamos conociendo los cubanos de acá y los de allá, a ver si por fin empezamos a creer en nosotros mismos y nos sacamos las victrolas y discotecas de la cabeza y aprendemos a recorrer nuestras calles, a leer en nosotros mismos la historia múltiple de nuestra familia...
Ana
Denis Álvarez Betancourt
La primera vez que divisé a Ana, estaba sumergida entre los brazos de un dragón enorme de ojos de fuego. Alex, creo se llamaba, y se consideraba el mejor ejemplar en casi toda la selva conocida. Fuerte, de pecho brillante y en donde mi Ana aparecía como un músculo más. Me cuidé de no mirar mucho tiempo, no se fuera a malinterpretar, pero, desde el fondo de aquella mole, dos ojos suplicantes me dijeron: “Rescátame y seré tuya para siempre”..
La Mandrágora
Jorge Luis Rodríguez Reyes
Dejó de escribir aquella mañana, cuando sintió vértigo al ver la columna de una fabulosa Mandrágora en el semicírculo de letras de la máquina de escribir. Súbitamente retiró los dedos del fierro lustroso, y con guantes de material sintético la llevó a la intemperie, dejándola en medio del patio colonial...
Casta sin nombre
Herbert Toranzo
Le tocaba hoy hasta el mediodía. Rogelio la recibió con impaciencia, vestido para la calle. —Menos mal —rezongó—. Ya deben de estar esperándome. —No te demores. A las dos tengo un ensayo —Fernanda pareció recordar algo y miró en redondo. Se hizo luego de un tono confidencial, conspiratorio—. ¿Dónde está?
Somos nosotros
Fidel Antonio Orta
Yo también prefería el sobrenombre. Tal vez misterioso, tal vez oscuro, pero mejor, Casona siempre resultó mejor. Distinguida versión tropical de un elegante estilo neoclásico todavía vivo entre columnas y decorados exteriores.
Tropas Auxiliares
Yoss
2013: la invasión definitiva. Una agresivísima raza de artrópodos alienígenas llega a la Tierra… y en pocos meses la conquista casi en un 99%. Son fuertes, resistentes, veloces y astutos. No tienen piedad. ¿Persiguen el completo exterminio de la raza humana?
Esclavos no solo de Dios
Lis Monsibáez
A Juan el Bautista lo decapitaron. Dice la Biblia que en una fiesta de cumpleaños del rey Herodes, la hija de la esposa bailó para él. Todos en la fiesta quedaron maravillados, por lo que Herodes le dice que pida lo que quiera…
Hasta 296
Daniel Burguet
Con este relato, el autor se dio a conocer como representante de la más nueva generación de narradores cubanos, reunida en el grupo literario Ariete…
¿Cómo matar al dinosaurio?
Yasel Toledo Garnache
Cada mañana el dinosaurio sigue ahí. Despierto con la esperanza de que todo sea un sueño, pero la realidad me golpea como una pedrada en la cabeza. Miro el revólver y lo tomo en mis manos…
Segunda parte
Ad Noctum – Segunda parte
Maikel José Rodríguez Calviño
Cuento de terror para jóvenes aparecido en El extraño crujir de las cosas mal dormidas, publicado por la Editorial José Martí…