Escritoras Francesas

Los aerostatos

Amélie Nothomb

"Los aerostatos" de Amélie Nothomb es una novela que, bajo la apariencia de un relato sencillo, esconde una profunda reflexión sobre el poder transformador de la literatura y las complejidades de las relaciones humanas. La trama sigue a Ange, una joven de diecinueve años que, mientras estudia filología en Bruselas, acepta el desafío de impartir clases particulares de literatura a Pie, un adolescente de dieciséis años cuyo desinterés por los libros parece insuperable. Pie, según su autoritario padre, sufre de dislexia y problemas de comprensión lectora, pero lo que realmente lo consume es un odio visceral hacia los libros y hacia sus padres, en contraposición a su fascinación por las matemáticas y, especialmente, por los zepelines. La relación entre Ange y Pie comienza de manera tensa, con el rechazo inicial de este último a cada una de las lecturas propuestas. Sin embargo, a medida que avanzan en textos como "Rojo y negro", "La Ilíada" y "La Metamorfosis", se evidencia un cambio en Pie. Estos libros, que en un principio solo…

Cuentos de las mil y una mañanas

Colette

"Cuentos de las mil y una mañanas" de Colette es una obra que destaca por su capacidad de capturar la esencia de los últimos años de la Belle Époque, un período histórico fascinante por su esplendor y decadencia. Publicado en 1910, el libro reúne una serie de artículos que la autora escribió para el periódico Le Matin, donde se le otorgó total libertad para explorar los temas que más la inspiraban. Este contexto de libertad creativa permitió a Colette desplegar su aguda capacidad de observación y su estilo inigualable, presentando una crónica vívida y perspicaz de la sociedad de su tiempo. Colette, una de las escritoras más destacadas de su generación, es conocida por su habilidad para retratar la vida cotidiana con una mirada libre de prejuicios y cargada de sensibilidad. En esta colección, su prosa brilla por su frescura y su capacidad para captar los matices de la vida urbana, desde los personajes más humildes hasta las figuras más destacadas de la sociedad. Su estilo, marcado por la ironía…

Los fuegos fatuos

George Sand

Los flambeaux, flambettes o flamboires, también llamados fuegos fatuos, son esos meteoros azulados que todo el mundo ha encontrado por la noche o ha visto danzar sobre la superficie inmóvil de las aguas pantanosas...

Las señoritas

George Sand

Les demoiselles o señoritas del Berry nos parecen primas de las milloraines normandas que el autor de La Normandie merveilleuse describe como seres de estatura gigantesca. Se mantienen inmóviles y su forma, poco definida, no permite reconocer ni sus miembros ni su rostro...

La invitada

Simone de Beauvoir

Simone de Beauvoir, una de las figuras más influyentes del existencialismo francés y del feminismo del siglo XX, presenta en su obra "La invitada" un retrato profundo de los dilemas morales y existenciales de sus personajes en el París de la primera mitad del siglo XX. En esta primera gran novela, De Beauvoir nos sumerge en un triángulo amoroso protagonizado por dos adultos y una joven, a través del cual explora temas como la libertad, la acción y la responsabilidad individuales, fundamentales en su obra. El escenario artístico y bohemio de París sirve de telón de fondo para la intrincada trama de relaciones interpersonales que De Beauvoir despliega magistralmente. La infidelidad y las complejas dinámicas de pareja se convierten en los vehículos a través de los cuales la autora expone las contradicciones y ambigüedades de la moral burguesa de la época. "La invitada" no solo fue un éxito inmediato, sino que también se ha consolidado con el tiempo como una obra fundamental que encapsula las grandes ideas que marcarían toda…

L’orco

George Sand

Amantine Aurore Dupin, conocida mundialmente como George Sand, fue una destacada escritora del siglo XIX cuyo espíritu rebelde y libertario permeó profundamente la literatura de su época. Su obra "L’orco", publicada en 1842, destaca por su habilidad para explorar los aspectos más oscuros de la condición humana y las complejidades de las relaciones interpersonales. En "L’orco", Sand nos sumerge en un ambiente sombrío y tormentoso desde el inicio, utilizando una narrativa vívida que atrapa al lector desde las primeras líneas. La trama gira en torno a un grupo de personajes reunidos bajo un emparrado en una noche de tormenta, donde la melancolía y la introspección dominan el ambiente. Es en este contexto que se desarrollan las profundas reflexiones sobre la naturaleza humana y los conflictos internos de los protagonistas. Uno de los aspectos más destacados de la novela es la caracterización de los personajes, especialmente de Beppa, quien se convierte en el foco central de la trama. Su compleja psicología y sus luchas internas son presentadas de manera magistral por…

El orco

George Sand

"Y cogiendo la mano del joven le llevó hacia la iglesia. Cuando éste sintió la mano fría de la desconocida estrechar la suya y la vio dirigirse con él hacia la oquedad sombría del pórtico, se acordó involuntariamente de las siniestras historias que había oído contar y, de pronto, transido de terror, se detuvo. La máscara se volvió y, fijando sobre el rostro sin color de su compañero una mirada escrutadora, le dijo:.."

El príncipe Fatal y el príncipe Fortuné

Jeanne Marie Leprince de Beaumont

"Al segundo príncipe, al que habían llamado Fortuné, todo le iba, al contrario, de maravilla. Su papá y su mamá lo amaban con locura y ya no se acordaban del mayor. La malvada mujer a la que se lo habían entregado, nada más llegar a su casa, le quitó las bellas ropas con las que iba vestido para ponérselas a uno de sus hijos que era de la edad que Fatal..."

Cuento de los tres deseos

Jeanne Marie Leprince de Beaumont

"-Soy un hada; prometo concederles las tres primeras cosas que deseen; pero tengan cuidado: después de haber deseado tres cosas, no les concederé nada más."

Una muerte muy dulce

Simone de Beauvoir

«No se muere de haber nacido, ni de haber vivido, ni de vejez. Se muere de algo. Saber que mi madre por su edad estaba condenada a un fin próximo no atenuó la horrible sorpresa. Un cáncer, una embolia, una congestión pulmonar: es algo tan brutal e imprevisto como un motor que se detiene en el aire. Mi madre alentaba al optimismo cuando impedida y moribunda afirmaba el precio infinito de cada instante; asimismo, su vano encarnizamiento desgarraba el velo tranquilizador de la superficialidad cotidiana. No hay muerte natural: nada de lo que sucede al hombre es natural puesto que su sola presencia pone en cuestión al mundo. Todos los hombres son mortales: pero para todos los hombres la muerte es un accidente, y aun así la conocen y la aceptan, es una violencia indebida».

Los nombres epicenos

Amélie Nothomb

Los nombres epicenos son aquellos que, como Claude o Dominique, pueden utilizarse tanto en masculino como en femenino. En esta historia Claude es él y Dominique ella. Él despliega un gran empeño en casarse con ella, y después pone todavía más tesón en dejarla embarazada, sometiéndola a una extenuante disciplina sexual. Al fin logra su objetivo y como resultado nace la hija de ambos, a la que le ponen el nombre de Épicène, tomado del título de una obra teatral de Ben Jonson –contemporáneo de Shakespeare– y que es también un nombre epiceno. Sin embargo, en cuanto se produce el nacimiento del bebé la obsesión procreadora del padre se torna indiferencia absoluta hacia su hija, una niña inteligente que crece envuelta en el absoluto desinterés de su progenitor hacia ella. Entre tanto, Claude y Dominique se han instalado en París, y él, arrastrado por una ambición social que también forma parte de sus empeños obsesivos, convence a su mujer de entablar amistad con una pareja de la alta burguesía financiera…

Las lavanderas nocturnas

George Sand

He aquí, en mi opinión, la más siniestra de las visiones del miedo. Es también la más difundida pues creo que se encuentra en todos los países...
Chéri - Colette - Novela Rosa

Chéri

Colette

Léa de Lonval, una atractiva cortesana, ha dedicado los últimos seis años de su vida a la educación amorosa de Fred Peloux, un joven apuesto, ensimismado y consentido a quien ha apodado Chéri. Cuando éste le confiesa que planea casarse por conveniencia, deciden poner fin a la relación. Sin embargo, Léa no había previsto cuán profundo es el deseo que la une a su amante, ni cuánto sacrificará al renunciar a él. En esta novela, una de las más dmiradas de la autora, Colette explora las crueles trampas de los juegos de seducción, dinamita los estereotipos sobre lo femenino y lo masculino, y retrata con gran sagacidad e ironía la alta sociedad francesa de principios del siglo XX.
Retrato de una mujer, llamada marquesa Perrin de Cypierre

La marquesa

George Sand

Casada a los dieciséis con un Marqués entrado en años, viuda a los dieciséis años y medio, la marquesa de R, tuvo una primera experiencia con el sexo opuesto negativa, que le llevó a despreciar a los hombres...
Las inseparables - Simone de Beauvoir

Las inseparables

Simone de Beauvoir

Escrita en 1954, cinco años después de la publicación de El segundo sexo, Las inseparables narra la amistad apasionada que une a Sylvie y a Andrée -alter ego de la propia Simone de Beauvoir y de Élisabeth Lacoin (Zaza)- desde que con nueve años se conocen en la escuela. Andrée es alegre, inteligente y atrevida, y Sylvie, una niña formal que se siente irremediablemente atraída por su personalidad arrolladora. Juntas aprenderán a librarse de las convenciones y las expectativas asfixiantes de su entorno, ignorantes del trágico precio que tienen la libertad y la ambición intelectual y existencial. Una historia catártica para la autora, tal vez demasiado reveladora para publicarla en vida, cuya recuperación -junto con algunas fotografías y cartas que sirven de testimonio- constituye un acontecimiento literario.
Retrato de Jean y Geneviève Caillebotte

Aurore y Aimée

Jeanne Marie Leprince de Beaumont

Había una vez una dama que tenía dos hijas. La mayor, que se llamaba Aurore, era bella como el día, y tenía un carácter bastante bueno. La segunda, que se llamaba Aimée, era tan bella como su hermana, pero era maligna, y sólo tenía talento para hacer el mal...
Colours of the Wind. Foto por Diana Simumpande en Unsplash

Ourika

Claire de Duras

Hacía tan sólo unos meses que había llegado de Montpellier, y ejercía en París la profesión de médico cuando, una mañana, fui llamado al barrio de Saint-Jacques para visitar a una joven religiosa enferma, en un colegio...
La condesa de Tende - Madame de La Fayette

La condesa de Tende

Madame de La Fayette

La señorita de Strozzi, hija del mariscal y pariente cercana de Catherine de Médicis, se desposó el primer año de la regencia de esta reina con el conde de Tende, de la casa de Saboya, rico, bien constituido, el cortesano que vivía con mayor esplendor, y más propio a hacerse estimar que amar...
El tren a Burdeos - Marguerite Duras

El tren a Burdeos

Marguerite Duras

Una vez tuve dieciséis años. A esa edad todavía tenía aspecto de niña. Era al volver de Saigón, después del amante chino, en un tren nocturno, el tren de Burdeos, hacia 1930. Yo estaba allí con mi familia, mis dos hermanos y mi madre...

Gigi

Colette

Gigi, escrita por la talentosa Colette y publicada por primera vez en 1945, ofrece una excepcional visión del París "fin de siècle". La ciudad está abrumada por los avances técnicos como el teléfono y el automóvil. Colette nos sumerge en una época donde celebridades como Cléo de Mérode o Carolina Otero eran habituales en los restaurantes de moda, como el Durand o el Pré-Catelan, y en los figurines chic. Además, la vida llena de escándalos era recogida por el Gil Blas y otra prensa del corazón. Sin eufemismos, Colette retrata la condición femenina, que oscila entre la estrechez económica y la ligereza moral. Colette, cerca del final de su vida, mantiene su estilo fresco e irreverente. Para componer el delicioso personaje de Gigi, recurre a elementos de su propia biografía. La autora, casada muy joven, comprende que el descubrimiento de su destino como mujer supone "el fin de mi carácter de muchacha, intransigente, bonito, absurdo", como confesó en *Lo puro y lo impuro*. La nueva traducción de José María Solé…