Cuentos de Kjell Askildsen

Café. Foto por karl chor en Unsplash

En el café

Kjell Askildsen

Una de las últimas veces que estuve en un café fue un domingo de verano, lo recuerdo bien, porque casi todo el mundo iba en mangas de camisa y sin corbata, y pensé: tal vez no sea domingo, como yo creía, y el hecho de que pensara exactamente eso hace que me acuerde...
Amistad

El precio de la amistad

Kjell Askildsen

"Pronunciaste un discurso y todo, dijo él. Oh, Dios mío, dije yo. Fue un bonito discurso, dijo él, hablaste de la amistad. No contesté; no me sentía muy a gusto. Por suerte, llegó la mesera con la comida..."

Elisabeth

Kjell Askildsen

"Cuando volví a casa de mi hermano, él aún no había llegado. Dije a Elisabeth que mi madre había enviado saludos para ella. ¿No te encontraste con Daniel?, preguntó. No, contesté. Fue a buscarte, dijo ella. ¿A casa de mi madre?, pregunté. Sí, respondió."
Joker

El comodín

Kjell Askildsen

Un sábado por la noche, hacia finales de noviembre, me hallaba solo en casa con Lucy. Yo estaba sentado en el sillón junto a la ventana, ella junto a la mesa del comedor haciendo un solitario, últimamente no paraba de hacer solitarios, yo no sabía por qué, pensaba que quizá tenía miedo de algo. Hace mucho calor, dijo Lucy, podrías abrir un poco la ventana...
Soñadora. Foto por Vidar Nordli-Mathisen en Unsplash

Desde ahora te acompañaré a casa

Kjell Askildsen

-Tampoco te esmeras mucho con los deberes, sales corriendo en cuanto acabas de comer. Por cierto, ¿qué haces en el bosque?...

Ajedrez

Kjell Askildsen

Un día hace mucho, antes de que mis piernas empezaran a flaquear seriamente, fui a visitar a mi hermano. No lo había visto desde hacía más de tres años, pero seguía viviendo donde fui a visitarlo la última vez...