El porche
Herman Melville
Al este, ese largo campo de las colinas Hearth Stone, que se desvanece a lo lejos, hacia Quito. Cada otoño, un copillo blanco de algo indefinido mira de pronto, en las mañanas frías, desde el farallón más alto. Es la oveja recién creada por la estación, su vellocino más temprano; y luego el amanecer de Navidad...
El campanario
Herman Melville
Sumérgete en la obsesiva búsqueda de un hombre por conocer al misterioso relojero encargado de las campanas de una catedral en construcción. A través de una prosa exquisita, Herman Melville explora los temas de la soledad, la marginación y la crueldad humana en un relato que te mantendrá en vilo hasta el final. Descubre cómo la vida de un hombre solitario se entrelaza con la construcción del campanario y su imponente presencia en el horizonte de la ciudad. No te pierdas esta obra maestra de uno de los grandes escritores estadounidenses del siglo XIX.
El vendedor de pararrayos (relato)
Herman Melville
El cuento se ambienta en medio de una tormenta cuando llama a la puerta de una casa un vendedor de pararrayos. En el breve relato bajo la lluvia y los relámpagos se inicia una lucha simbólica entre el bien y el mal, la religión y la ciencia entre dos personajes anclados a sus creencias...
Benito Cereno
Herman Melville
Corría el año 1799, cuando el capitán Amasa Delano, de Duxbury (Massachusetts), al mando de un gran velero mercante, ancló con un valioso cargamento en la ensenada de Santa María, una isla pequeña, desierta y deshabitada, situada hacia el extremo sur de la larga costa de Chile....
El Paraíso de los solteros y el Tártaro de las doncellas
Herman Melville
No queda lejos de la raya del Temple. Ir hasta allí, por el camino de siempre, es como pasar de una calurosa llanura a algún valle fresco y profundo rodeado de montañas...
El violinista
Herman Melville
"¡Así que mi poema es nefasto, y la fama inmortal no es para mí! Voy a ser un don nadie por siempre jamás. ¡Intolerable destino!..."
Bartleby, el escribiente
Herman Melville
Soy un hombre de cierta edad. En los últimos treinta años, mis actividades me han puesto en íntimo contacto con un gremio interesante y hasta singular, del cual, entiendo, nada se ha escrito hasta ahora: el de los amanuenses o copistas judiciales...