Cuentos Cubanos

Relato de ciencia ficción perteneciente al libro ganador del Premio de la AHS en el concurso Regino E. Boti de Guantánamo en la Jornada de Artes Plásticas y Literatura…

"Era un día normal de agosto: un sol terrible, calor y humedad agobiante. Me fui temprano a la playa y alcancé un poco de sombra bajo una uva caleta. Mucha gente. Detrás de las dunas había ómnibus, autos y camiones, parqueados en una callejuela estrecha y sin pavimentar que une la carretera principal con aquel trozo de playa..."

Cuento inédito, incluido en el libro Visita al cuarto oscuro, de próxima aparición por Iliada Ediciones…

En este fragmento de una novela en preparación, un hombre sale en busca de su abuelo o de entender el origen ancestral del abuso contra la mujer…

"De Caen salí portando una seudopiel auto generable, construida a partir de mis propias células y que, colocada sobre la mía, evita el escape de los gérmenes patógenos, genéticamente modificados, que me mantienen vivo. Pero con seudopiel y todo, ningún gobierno estuvo dispuesto a permitirme deambular a mi libre arbitrio por su territorio..."

"Quizás habría bastado con esa mirada… pero se impuso sentarse en el único banco vacío del parque y hablar y hablar, sin dejar de mirarse, hasta poco a poco construir ese clásico puente de palabras que las normas sociales obligan a dos desconocidos a erigir sobre el abismo de su anterior ignorancia para poder volverse amigos… o algo más..."

"Y aquel abismo de incomprensión y rechazo terminó por convertirlos en dos extraños. Hasta que un día, después de una discusión en que él le dejó marcado un brazo, la asaltó, más bien la golpeó, una pregunta: “¿Cómo será mi vejez con un loco tan prepotente al lado?”..."

"Yo nací enfermizo, por eso me criaron con lástima, con tanta lástima que llegué a sentir miedo por casi todo. Según el médico de la familia y otros que me consultaron en el Hospital Infantil mis padecimientos serían para toda la vida. Asma grado tres y un soplo en el corazón. Cuando menos lo esperaba, me entraba una falta de aire de pinga o continuas taquicardias..."

Eran siete los asesinatos desde el segundo jueves de abril. Siempre el segundo jueves de cada mes. Si había un hombre en la casa lo asesinaba antes de agredir sexualmente a la mujer…

"Mi casa la conoce todo el mundo porque entra mucha gente; unos abrazan a mamá, otros a Zoila, muy pocos a Zenaida que se levanta todas las mañanas y hace el café para los hombres. “Dígase hombre y se han dicho todos los derechos”. Entran en mi cuarto, estrujan mi cama. Mamá siempre sale colorada y le enseña el cuello a Zenaida..."

Sí, mamá, fui yo quien la mató. Es verdad que me dio calabazas una pila de veces y yo quería vengarme. ¿Quién dijo que a esa edad no hay criminales?...

Fragmento de una novela descrita como mezcla “de la sensualidad de Petronio y la picardía de Bulgakov” y recién publicada por Editorial El Ateje en Miami…

"Nos quedamos en silencio. Me da la impresión de que se distancia. Fuma y mira por la ventana que tiene al frente. Se ve un pedazo de cielo azul con nubes pequeñas y blancas. También se ven algunos edificios del Vedado y de Centro Habana. Parece que se queda flotando en el vacío y gana distancia y frialdad. Sin mirarme directamente me dice:"

"Al salir, con paso inestable, tropieza con el cadáver que sigue sentado a la mesa —la mesa ordenada para dos porque esa tarde sería más que un almuerzo—, con el rostro hundido en el plato de camarones; con el charco de sangre cada vez más amplio en el mantel..."

"Desde el principio Juanco había hablado del empaste del tercero, como que tenía los tonos perfectos, pero la pata de la cama, ubicada a la izquierda en el tercio inferior del cuadro, llamaba demasiado la atención. Si no es porque hay una mujer desnuda, aseguró, uno se va con la pata, el cuadro se resume en la pata de la cama..."

“Dotado de 3 000 rublos, este certamen se abre para fomentar el conocimiento sobre hechos sangrientos que escapan al dominio público. Convocado por la Red de Bibliotecas Ambulantes, el concurso pretende acercar a nuestros masivos lectores a sucesos delictivos que pueden sorprenderlos en plena luz del día en el lugar menos pensado y así alertarlos de ser víctimas de un atentado”...

"Muy pronto Sigal sintió interés por la misión que había llevado hasta lugares tan lejanos de Gran Bretaña al capitán del Beagle y su más ilustre viajero. El aislamiento había dejado con apetito de sobra su mente, y quería saber acerca de todo; para empezar, cómo pudo llegar una manada de cabras hasta una isla deshabitada donde desembarcaron."

"El hombre rasga el envoltorio de la caja de cigarrillos y enciende uno. Tras la primera cachada, bebe otro poco de café, lo que acelera su apetito de fumar. Siempre le ha gustado esa reacción en cadena, tan similar a la que origina el beso de una mujer: la caza de un segundo, un tercero y centenares más."

Cuento perteneciente a Minutos de silencio, ganador del Premio David de narrativa en 2017…

"A lo lejos se oyeron toques de trompeta y repiques de címbalos, y la multitud amontonada en los muros de la ciudad pudo ver en la lontananza un punto negro que avanzaba en la llanura y que, al acercarse, crecía, extendiéndose por el horizonte como un vasto batallón de hormigas. Los cruzados estaban allí."