La hija del rey Dragón
Li Chaowei
"En los tiempos del período Yifeng (676-678), un bachiller llamado Liu Yi, al fracasar en un examen oficial decidió regresar a orillas del río Xiang (provincia de Hunan). Como tenía un paisano que residía en Jingyang (provincia de Shaanxi), allí fue a decirle adiós..."
El halcón de Federigo
Giovanni Boccaccio
"Él, por muy extrema que fuese su pobreza, no se había percatado todavía de cuánto necesitaba las riquezas que había gastado desordenadamente; pero esta mañana, no encontrando nada con que poder honrar a la señora por amor de quien ya había honrado a infinitos hombres, se lo hizo ver..."
El cordel del dedo
Giovanni Boccaccio
El cordel del dedo es un cuento de Giovanni Boccaccio que narra la historia de un joven que se enamora de una mujer casada y le envía un regalo muy peculiar. ¿Quieres saber qué es y cómo reacciona ella? Descubre este relato lleno de humor, ironía y erotismo, que forma parte del famoso Decamerón, una obra maestra de la literatura universal. No te pierdas esta oportunidad de leer una joya del siglo XIV que sigue vigente y sorprendente hoy en día.
Después de abusar de la mujer de un hidalgo
Margarita de Navarra
De cómo el rey de Nápoles, después de abusar de la mujer de un hidalgo, lleva luego él mismo los cuernos...
El cocinero Chichibio
Giovanni Boccaccio
Currado Gianfiglazzi se distinguía en nuestra ciudad como hombre eminente, liberal y espléndido, y viviendo vida hidalga, halló siempre placer en los perros y en los pájaros, por no citar aquí otras de sus empresas de mayor monta...
El amante dormido
Giovanni Boccaccio
No hace mucho tiempo hubo en Salerno un grandísimo médico cirujano cuyo nombre fue maestro Mazzeo de la Montagna, el cual, ya cerca de sus últimos años, habiendo tomado por mujer a una hermosa y noble joven de su ciudad, de lujosos vestidos y joyas y de todo lo que a una mujer puede placer más, la tenía abastecida...
La marquesa
George Sand
Casada a los dieciséis con un Marqués entrado en años, viuda a los dieciséis años y medio, la marquesa de R, tuvo una primera experiencia con el sexo opuesto negativa, que le llevó a despreciar a los hombres...
Anastasio
Giovanni Boccaccio
Había en Rávena, antigua ciudad de la Romaña, muchos gentiles hombres, entre los que se hallaba un mozo de nombre Anastasio degli Onesti, muy rico por herencia de su padre y de su tío. Y estando sin mujer, se enamoró de una hija de micer Pablo Traversari...
Historia de Abdula, el mendigo ciego
Anónimo
El mendigo ciego que había jurado no recibir ninguna limosna que no estuviera acompañada de una bofetada, refirió al Califa su historia...
El Ángel de la Muerte y el rey de Israel
Anónimo
Se cuenta de un rey de Israel que fue un tirano. Cierto día, mientras estaba sentado en él. Trono de su reino, vio que entraba un hombre por la puerta de palacio; tenía la pinta de un pordiosero y un semblante aterrador...
Historia de Alí Babá y los Cuarenta Ladrones
Anónimo
Recuerdo, ¡oh rey afortunado!, que en tiempos muy lejanos, en los días del pasado, ya ido, y en una ciudad entre las ciudades de Persia, vivían dos hermanos; uno se llamaba Kasín y el otro Alí Babá...
Historia de Aladino y la Lámpara Mágica
Anónimo
He llegado a saber ¡oh rey afortunado! ¡oh dotado de buenos modales! que en la antigüedad del tiempo y el pasado de las edades y de los momentos, en una ciudad entre las ciudades de la China, y de cuyo nombre no me acuerdo en este instante, había -pero Alah es más sabio- un hombre que era sastre de oficio y pobre de condición...
Historia Prodigiosa de la Ciudad de Bronce
Anónimo
Cuentan que en el trono de los califas Omniadas, en Damasco, se sentó un rey -¡sólo Alah es rey!- que se llamaba Abdalmalek ben-Merwán. Le gustaba departir a menudo con los sabios de su reino acerca de nuestro señor Soleimán ben Daúd (¡con él la plegaria y la paz!), de sus virtudes, de su influencia y de su poder ilimitado sobre las tierras de las soledades, los efrits que pueblan el aire y los genios marítimos y subterráneos...
Historia de Sindbad el Marino
Anónimo
He llegado a saber que en tiempo del califa Harún Al-Rachid vivía en la ciudad de Bagdad un hombre llamado Sindbad el Cargador. Era de condición pobre, y para ganarse la vida acostumbraba a transportar bultos en su cabeza...
Historia de Ghanem Ben-Ayub y de su Hermana Fetnah
Anónimo
He llegado a saber, ¡oh rey afortudado! que en la antigüedad de los tiempos, en lo pasado de los siglos y de las edades, hubo un mercader entre los mercaderes que era riquísimo y padre de dos hijos. Se llamaba Ayub, y su hijo varón, Ghanem ben-Ayub, fue conocido después por el sobrenombre de El-Motim El-Masslub, y era tan hermoso como la luna llena, y estaba dotado de una elocuencia maravillosa...
Historia del Jorobado, con el Sastre, el Corredor Nazareno, el Intendente y el Médico Judío
Anónimo
He llegado a saber, ¡oh rey afortunado! que en la antigüedad del tiempo y en lo pasado de las edades y de los siglos, hubo en una ciudad de la China un hombre que era sastre y estaba muy satisfecho de su condición...
Historia del Visir Nureddin, de su Hermano el Visir Chamseddin y de Hassán Badreddin
Anónimo
Entonces, Giafar Al-Barmaki dijo: “Sabe, ¡oh Comendador de los Creyentes! que había en el país de Mesr un sultán justo y benéfico. Este sultán tenía un visir sabio y prudente, versado en las ciencias y las letras. Y este visir, que era muy viejo, tenía dos hijos que parecían dos lunas...
Historia de la Mujer Despedazada, de las Tres Manzanas y del Negro Rihán
Anónimo
Schahrazada dijo: “Una noche entre las noches, el califa Harun Al-Rachid dijo a Giafar Al-Barmaki: “Quiero que recorramos la ciudad, para enterarnos de lo que hacen los gobernadores y walíes. Estay resuelto a destituir a aquellos de quienes me den quejas,”...
Historia del Mandadero y de las Tres Doncellas
Anónimo
Había en la ciudad de Bagdad un hombre que era soltero y además mozo de cordel. Un día entre los días, mientras estaba en el zoco, indolentemente apoyado en su espuerta, se paró delante de él una mujer con un ancho manto de tela, de Mussul, en seda sembrada de lentejuelas de oro y forro de brocado...
Historia del Pescador y el Efrit
Anónimo
He llegado a saber, ¡oh rey afortunado! que había un pescador, hombre de edad avanzada, casado, con tres hijos y muy pobre...