Relatos

Vicar's Close. Foto por Annie Spratt en Unsplash

Las puertas se abren a las tres

Guillermo Cabrera Infante

Arriba el sol era un hueco en el cielo por donde entraba el mediodía: el amarillo amarillo de los edificios pintados de amarillo y el blanco quemante de las aceras y el malva del asfalto y el negro de la pelambre de los gatos que dormían en los tejados y el azul de las niñas de los ojos de las niñas de azul...
Escena de playa, por Winslow Homer

Adiós, hermano mío

John Cheever

La nuestra es una familia que siempre ha estado muy unida espiritualmente. Nuestro padre se ahogó por accidente navegando a vela cuando éramos muy jóvenes, y nuestra madre siempre ha insistido en el hecho de que nuestras relaciones familiares poseen una estabilidad que nunca volveremos a encontrar...
Avenida 5 de Mayo

Avenida de Mayo-Diagonal-Avenida de Mayo

Juan Carlos Onetti

Cruzó la avenida, en la pausa del tráfico, y echó a andar por Florida. Le sacudió los hombros un estremecimiento de frío, y de inmediato la resolución de ser más fuerte que el aire viajero quitó las manos del refugio de los bolsillos, aumentó la curva del pecho y elevó la cabeza, en una búsqueda divina en el cielo monótono...
Yonker Ramp and His Sweetheart, por Frans Hals

El Paraíso de los solteros y el Tártaro de las doncellas

Herman Melville

No queda lejos de la raya del Temple. Ir hasta allí, por el camino de siempre, es como pasar de una calurosa llanura a algún valle fresco y profundo rodeado de montañas...
Reunión en Cuba, por Jules Pascin

El traidor

Reinaldo Arenas

"¿Qué sabe usted de él? Qué sabe nadie... Ahora que Fidel Castro se cayó, lo tumbaron o se cansó, todo el mundo habla, todo el mundo puede hablar. El sistema ha cambiado otra vez. Ah, ahora todo el mundo es héroe. Ahora todo el mundo resulta que estaba en contra..."
El perrito Laertes, por Berthe Morisot

Miss Dollar

J. M. Machado de Assis

Era conveniente para el relato que el lector permaneciera mucho tiempo sin saber quién era Miss Dollar. Pero por otro lado, sin la presentación de Miss Dollar, el autor se vería obligado a largas digresiones, que llenarían el papel sin hacer progresar la acción. No hay duda posible: voy a presentarles a Miss Dollar...
Don Quijote y Sancho Panza, por Honoré Daumier

Pierre Menard, autor del Quijote

Jorge Luis Borges

La obra visible que ha dejado este novelista es de fácil y breve enumeración. Son, por lo tanto, imperdonables las omisiones y adiciones perpetradas por madame Henri Bachelier en un catálogo falaz que cierto diario cuya tendencia protestante no es un secreto ha tenido la desconsideración de inferir a sus deplorables lectores —si bien estos son pocos y calvinistas, cuando no masones y circuncisos...
La tierra y el libro, por William McClure Thomson

La inundación

Isak Dinesen

Durante el primer cuarto de siglo pasado estaban de moda los lugares cercanos al mar, incluso entre los habitantes del norte de Europa, donde perduraba la idea de que el mar personifica al Demonio, enemigo frío, voraz y tradicional de la humanidad...
Dry Desert Drives. Foto por Adrien Coquet en Unsplash

El asedio

Emilio Díaz Valcárcel

Una familia normal y feliz, pensó apoyada sobre el vo­lante. Un padre gordo y de apariencia próspera, recién afei­tado, una bella pareja de niños, y una madre que alcanza ya los treinta años, mofletuda, satisfecha como toda mujer que siente colmados sus instintos cardinales...
Escándalo en Bohemia, por Sidney Paget

Escándalo en Bohemia

Arthur Conan Doyle

Para Sherlock Holmes ella es siempre «la mujer». Rara vez le he oído mencionarla con otro nombre. A sus ojos eclipsa a la totalidad de su sexo y la supera. Y no es que sintiera hacia Irene Adler un sentimiento semejante al amor...
Caliban, por Odilon Redon

Retrato de un genio

Liliana Heker

Si una consigue no pensar mientras golpea exactamente cien veces la pared con la ventana, el tiempo pasa rápido, muy rápido, y puede ser que cuando menos se lo espere Lucía se despierte y adiós problemas...
Carving wooden shoes. Foto por Raoul Ortega en Unsplash

El zapaterito de Guanajuato

Elena Garro

Iba yo bajando la avenida, llevaba a Faustino de la mano, mi nietecito no decía nada, aunque yo bien veía que los tres días de girar por la ciudad, sin alimento y sin cobijo, lo habían amedrentado...
Obispo Altobello Averoldo, por Francesco Raibolini

El viejo señor obispo

Augusto Roa Bastos

"El viento de ese frío anochecer de julio ululaba en el agujero del techo de la sala donde faltaban varias tejas. La señorita Teresa no pudo percibir otro sonido. Pensó que su hermano dormía profundamente. Pero el otro pensamiento que sentía en el corazón como una puntada volvió a hacerle bajar los párpados. «Somos un grano de polvo en el dorso de tu mano, Dios mío…»"
Quemar graneros, un cuento de Haruki Murakami

Quemar graneros

Haruki Murakami

La conocí en la boda de un amigo y nos hicimos íntimos. Fue hace tres años. Entre nosotros casi había una generación de diferencia; ella tenía veinte años, yo treinta y uno, aunque en verdad eso no representaba ningún impedimento...
Lose Yourself. Foto por Clay Banks en Unsplash

La conversión de los judíos

Philip Roth

—Te las pintas solo para ser el primero en abrir esa bocaza —dijo Itzie—. ¿Por qué te pasas el tiempo abriendo esa bocaza? —No fui yo quien sacó el tema —dijo Ozzie. De veras que no. —¿Y a ti qué te viene ni te va Jesucristo, ya que estamos?...
Writer. Foto por hannah grace en Unsplash

Escritor fracasado

Roberto Arlt

Nadie se imagina el drama escondido bajo las líneas de mi rostro sereno, pero yo también tuve veinte años, y la sonrisa del hombre sumergido en la perspectiva de un triunfo próximo...
Dog. Foto por Florian Schneider en Unsplash

Ojos de perro azul

Gabriel García Márquez

"La vi caminar hacia el tocador. La vi aparecer en la luna circular del espejo mirándome ahora al final de una ida y vuelta de luz matemática. La vi seguir mirándome con sus grandes ojos de ceniza encendida: mirándome mientras abría la cajita enchapada de nácar rosado..."
En el observatorio astronómico de AVU, un cuento de H. G. Wells

En el observatorio astronómico de AVU

H. G. Wells

El observatorio de Avu, en Borneo, se alza sobre el espolón de la montaña. Al norte se eleva el viejo cráter, negra silueta nocturna contra el insondable azul del cielo...
Cusco, Peru. Foto por Ben Ostrower en Unsplash

Los escoleros

José María Arguedas

El wikullo es el juego vespertino de los escoleros de Ak’ola. Bankucha era el escolero campeón en wikullo. Gordinflón, con aire de hombre grande, serio y bien aprovechado en leer, Bankucha era el “Mak’ta” en la escuela; nosotros a su lado éramos mak’tillos no más, y él nos mandaba...
Reading book. Foto por Jilbert Ebrahimi en Unsplash

La vuelta en redondo

Humberto Arenal

“…todo me llega tarde hasta la muerte, como si uno pudiera decidir lo que le gusta, esta gente que me rodea, ya es muy tarde, la muerte no será tan mala después de todo si lo que uno deja está tan podrido, siempre ahí callada cuando no está así me mira con sus ojos desconfiados y duros siempre igual, treinta años mira que tener que haberla aguantado treinta años a mi lado, antes siquiera…”