El caballero doble
Théophile Gautier
"El extranjero era bello como un ángel, pero como un ángel caído; sonreía dulcemente y miraba dulcemente, sin embargo, aquella mirada y aquella sonrisa os helaban de terror y os inspiraban el pavor que se siente cuando uno se asoma a un abismo."
La dimisión de Santiesteban
Javier Marías
"De todos los que han pasado por allí, ya sea como profesores, como alumnos o como meros asiduos a la biblioteca, es bien sabido que las puertas del instituto se cierran a las nueve en punto (es decir, media hora más tarde de que finalicen las últimas clases nocturnas)."
Crepúsculo (1644)
Manuel Mujica Lainez
"Y las indias… En su estancia de San Bartolomé había una india más delicada, más sutil que las blancas. Millares de vacunos pueblan hoy esa heredad cordobesa de San Bartolomé. ¿Para qué los quiere, si todo se reduce a hacerse aire con el abanico de su mujer y a soñar?"
Roger Dodsworth: El inglés reanimado
Mary W. Shelley
"Quizá se recuerde que el cuatro de julio pasado apareció un párrafo en los periódicos indicando que el doctor Hotham, de Northumberland, cuando regresaba hace unos veinte años de Italia, sacó de debajo de una avalancha en el Monte St. Gothard, en las proximidades de la montaña, a un ser humano cuya animación había sido suspendida por la acción de las bajas temperaturas."
Bloqueados por la nieve
Bret Harte
"—Hay entre vosotros uno que lleva un fajo de billetes —dijo la voz con una frialdad oficial que daba a sus palabras el carácter de una investigación aduanera. Los viajeros se miraron entre sí, después sus ojos se fijaron en Hale."
Una venganza
Isabel Allende
"—Es la hora, hija —dijo gatillando el arma mientras a sus pies crecía un charco de sangre. —No me mate, padre —replicó ella con voz firme—. Déjeme viva, para vengarlo y para vengarme."
Correspondencia
Carson McCullers
"Imagino que al ver la dirección estadounidense de esta carta supondrás de qué se trata. En el tablón de anuncios de mi escuela he encontrado tu nombre en una lista de estudiantes sudamericanos con los que podemos escribirnos. Soy la persona que te ha elegido."
Accidente ferroviario
Thomas Mann
"Un empleado sin gorra corría de una a otra del tren: era el jefe de la estación, quien a gritos y entre lágrimas recomendaba a los pasajeros que guardaran disciplinas, despejaran la vía y entraran en los vagones. Pero nadie le hacía caso, porque no llevaba gorra y su actitud no inspiraba respecto. ¡Pobre hombre!"
El torno de los rumores
Maeve Brennan
"Uno de mis nombres es Bridget y ella tenía la idea de que algún día se me despertaría la vocación y me haría clarisa pobre yo también. Rezaba muchas oraciones por mi vocación y a mí me gustaba hablar con ella al respecto. Yo tenía entonces unos doce años."
El converso
Juan José Arreola
"Fui a dar de bruces en el infierno, pero no dudé un solo instante. Rodeado de diablos tenebrosos, la idea de perdición no pudo abrirse paso en mi cabeza. Legiones de hombres sufrían tormento en máquinas horribles; sin embargo, a cada hecho desolador, mi fe respondía: Dios quiere probarme."
Como en las estampas
Amado Nervo
«Como en las estampas» puede parecer desconcertante porque parte de ideas religiosas —y no de influencias literarias o anécdotas reales— para crear una ficción, pero allí radica justamente su atractivo: pone a prueba aquello en lo que muchas personas creen de un modo inusual.
La enferma o la encamada
Patricia Highsmith
"Algunos días se levantaba, principalmente por aburrimiento. A veces estaba levantada cuando hacía sol, pero no siempre. Cuando no hacía sol, o amenazaba lluvia, Christine se sentía fatal y se quedaba en la cama..."
El dedo medio del pie derecho
Ambrose Bierce
"Lucían lo suficiente extraños a la luz amarilla de la vela. El que se había apeado tan renuente era especialmente espectacular, podía haber sido llamado sensacional. Era de mediana edad, de complexión robusta, pecho profundo y ancho de hombros..."
El difunto y yo
Julio Garmendia
"Lo busqué en seguida en el aposento donde se me había revelado su brusca ausencia. Lo busqué detrás de las puertas, debajo de las mesas, dentro del armario. Tampoco apareció en las demás habitaciones de la casa..."
La casa de la calle Turk
Dashiell Hammett
"No me levanté; no pude. Me había quedado paralizado. Permanecí sentado y dirigí la mirada a los Quarre. Al verlos me dije que era imposible que algo frío me tocara la nuca, que era imposible que una voz áspera me ordenara que me levantara. No podía ser..."
La semana de colores
Elena Garro
"No era verdad. Había días mejores para morir. El martes era delgadito y transparente. Si morían en martes, verían a través de sus paredes de papel de china los otros días, los de adelante y los de atrás. Si morían en jueves, se quedarían en un disco dorado dando vueltas como en los «caballitos» y verían desde lejos a todos los días."
El acoso
Alejo Carpentier
"…ese latido, que me abre a codazos; ese vientre en borbollones, ese corazón que se me suspende, arriba, traspasándome con una aguja fría; golpes sordos que me suben del centro y descargan en las sienes, en los brazos, en los muslos; aspiro a espasmos..."
El ladrón de Shady Hill
John Cheever
"Tenía muchos amigos, pero aunque mi vida dependiera de ello no podría pedirle a un hombre que me invitara a una copa y darle un sablazo de quinientos billetes; y yo necesitaba más. Lo peor de todo es que no había descrito la situación a mi mujer de una forma adecuada..."
Jenny
Kurt Vonnegut
"Aquellos sesos eran el sistema electrónico más ingenioso, más complicado y más bello que había visto. El dinero no era un problema cuando se trataba de Jenny..."
Cuentos para tahúres
Rodolfo Walsh
"El montoncito de las apuestas fue creciendo: había billetes de todos tamaños y hasta algunas monedas que puso uno de los de afuera. Flores parecía vacilar. Por fin largó los dados. Pereyra no los miraba. Tenía siempre los ojos en las manos de Flores..."