La joven del abrigo largo
Cruza todos los días la plaza en el mismo sentido.
Es hermosa. Ni alta ni baja, tal vez un poco gruesa. Grandes ojos, nariz regular, boca madura que azucara el aire y no quiere caer de la rama.
Sin embargo, tiene un gesto amargado y siempre lleva un abrigo largo y suelto. Aunque haga un calor excepcional. Esta prenda no cae jamás de su cuerpo. Invierno y verano, más grueso o más delgado, siempre el sobretodo como escondiendo algo. ¿Es que ella es tímida? ¿Es que tiene vergüenza de tanta calle inútil?
¿Ese abrigo es la fortaleza de un secreto sentimiento de inferioridad? No sería nada raro. Por eso tiene un estilo arquitectónico que no sabría definir, pero que, seguramente, cualquier arquitecto conoce.
Tal vez tiene el talle muy alto o muy bajo, o no tiene cintura. Tal vez quiere ocultar un embarazo, pero es un embarazo demasiado largo, de algunos años. O será para sentirse más sola o para que todas sus células puedan pensar mejor. Saborea un recuerdo dentro de ese claustro lejos del mundo.
Acaso quiere sólo ocultar que su padre cometió un crimen cuando ella tenía quince años.
FIN
Vicente Huidobro. Fue un poeta chileno, inventor del movimiento poético denominado Creacionismo, que nació en Santiago el 10 de enero de 1893 y que falleció en Cartagena el 2 de enero de 1948. Nacido en el seno de una familia acomodada e intelectual, pasó su infancia viajando por Europa, tras lo que se educó en Santiago, en un colegio jesuita. Estudió literatura en la Universidad de Chile y en 1911 publicó su primer poemario, Ecos del alma, con fuertes influencias modernistas. A partir de ahí fundó y colaboró en diversas revistas, en las que siguió publicando sus escritos. En 1916 se trasladó a París, donde entró en contacto con los grandes vanguardistas y, tras dedicar un tiempo al surrealismo, decidió romper con éste y con el futurismo, creando su propio movimiento, el Creacionismo, por el que el poeta se equipara con «un pequeño Dios» que compite con la propia Naturaleza al crear obras e imágenes trascendentes. Huidobro y su aventura creacionista, encuentran su punto más alto en Altazor publicado de forma completa en 1931.
Residió en Argentina, Francia y España, apoyando al bando republicano en este último país. Ya de regreso en su país también se implicó activamente en política, favoreciendo al partido comunista chileno.
Ya en Chile, estuvo en conflicto constante con su coetáneo Pablo Neruda, con quien competía de manera continua. Además de la poesía, escribió novelas y guiones cinematográficos, y se mantuvo activo como cronista, conferenciante y poeta hasta su muerte en la tranquila localidad de Cartagena en 1948.