La “Biblia” de Gutenberg, ha regresado a la Universidad de Sevilla, tras un proceso de conservación en el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico.
Los 130 folios de que consta el histórico ejemplar, que entre 1453 y 1455, salió de la primera imprenta de tipos móviles fabricada por Johannes Gutenberg, ha sido escrutado con rayos X y sometido a un estudio de la tinta de sus letras y de los pigmentos de sus capitulares; así los técnicos han podido determinado que, para sus cinco siglos y medio de edad, la “Biblia” mantiene un magnífico estado de conservación y apenas ha habido que intervenir sobre ella.
Desde el mes de septiembre hasta la fecha se han atajado pequeños deterioros para prevenir que se agravaran en el futuro y solamente se ha intervenido en alguna página en la que habían actuado xilófagos, según ha explicado la directora de la Universidad de Sevilla, Julia Mensaque.
Por su parte, Eduardo Peñalver, responsable del Fondo Antiguo de la biblioteca universitaria, ha recalcado que se trata de un ejemplar del “primer libro que abre la era de la imprenta manual” y además es “el libro más hermoso jamás impreso, recuerda a un códice, fue un logro extraordinario por su perfección y armonía en cada una de sus páginas”.
Del taller de Gutenberg, salieron entre 180 y 220 ejemplares de la “Biblia”, una sexta parte en pergamino y el resto en papel. Actualmente se conservan unos cuarenta ejemplares, en España, la Biblioteca de Burgos posee un ejemplar completo, con sus dos tomos; mientras que la Universidad de Sevilla posee solamente un tomo: el segundo volumen, integrado por 130 folios de papel impreso por ambas caras.
Considerada el incunable más importante de la historia por su perfección técnica y su repercusión cultural, la “Biblia de Gutenberg” o “Biblia Mazarina” o “Biblia de las 42 líneas”, como también se le conoce, precisamente en alusión al número de líneas que posee en cada página, fue impresa en Maguncia (Alemania) y su valor en el mercado del libro es difícil de calcular, aunque consta que el último ejemplar que salió a la venta, en 1978, se vendió por dos millones de dólares.