Poemas:
OBSTINACIÓN
Insiste en la forma
quiere convertir
una cosa en otra
se maltrata
se expone a riesgos
hoy está construyendo
un objeto cóncavo
y dice que tiene que flotar
BELCHITE
El herrero
tiene buen
corazón
a ratos
maldice
son
muchos años
en la forja
disfruta
el bullicio
de la vida
una mujer
le sonríe
y entonces
los ojos
le brillan
de regocijo
pura
embriaguez
FÁBULA
Es tiempo de lluvias
y la música del agua
me hace pensar
que el poema debería dar pie
a una composición para orquesta
que eleve un poco el alma
nada de licencias poéticas
sino unos versos sutiles
que den cuenta de cierto cautiverio
de cierta resistencia
de cierto forcejeo
algo biográfico
hondo
digno de memoria
pero a través de una pequeña fábula
que a su vez fuera
la historia natural de las plantas
AMANECE
¡Ah!
esta certeza
feliz y solitaria
de que el primer
pensamiento
fue tu rostro
INFANCIA
Era el velorio
de tu padre
muchacha
y yo sólo
veía tus trenzas
DRAGONEAR
Cuáles asuntos
afligen al dragón
por qué su gesto
desapacible
de cuáles actos
se hace responsable
con qué afán se esmera
en ser un monstruo
FORTALEZA
Para impedirte el paso
tendría que levantar
el puente levadizo
siempre
que la excavación fuera profunda
y circundara la fortaleza
pero qué hacer sin foso
sin puente
sin castillo
DIFICULTADES DE LA POESÍA
La idea era
beber un poco
ponernos alegres
pero nos emborrachamos
en exceso
y lo que hicimos
fue tener una opinión
demasiado buena
de nosotros mismos
EL TIEMPO
Se supone que algo hace el tiempo
que anda dicen unos
otros que vuela
otros que depende de la ocasión
que de tiempo en tiempo es una cosa
y otra muy distinta intempestivamente
estos versos fueron escritos a intervalos
VISIÓN
El asno
carga
un arpa
apunto
en la libreta
qué
suerte
tengo
PUEBLO
El perro
y el buey
no tienen
dueño
el mirlo
escarba
en la basura
aquí fue
la matanza
EL INSECTO
El insecto va de viaje por el muro
parece que goza de todas sus facultades
y no teme ningún peligro
nada hace pensar en plazos o vencimientos
dicen que fue larva
y que ha sufrido diversas transformaciones
MALA ESPINA
Por decir la rosa
sangro y fracaso
con esmero
VISIÓN
Es más claro el cielo
en el arroyo
Biografía:
Gustavo Adolfo Garcés Escobar, destacado poeta colombiano, nació el 2 de enero de 1957 en Medellín y ha dejado una huella indeleble en el panorama literario de su país. Desde 1987, reside en Bogotá, donde ha cultivado una carrera multifacética. Además de su innegable talento poético, posee una formación jurídica como abogado graduado de la Universidad de Antioquia y una maestría en Estudios Políticos otorgada por la Universidad Javeriana.
A lo largo de su trayectoria, Garcés ha compartido su sabiduría como profesor de literatura y ciencia política en prestigiosas instituciones educativas como las universidades de Antioquia, del Rosario y Javeriana de Bogotá. Su compromiso con la promoción de la cultura literaria se extiende a su rol como coordinador de talleres en la Casa de Poesía José Asunción Silva y como asesor de la Delegada para la Prevención en Materia de Derechos Humanos y Asuntos Étnicos en la Procuradoría General de la República de Colombia.
A lo largo de su carrera, Garcés ha enriquecido la literatura colombiana con una serie de obras notables. Entre estas destacan “Libro de poemas” (1987), “Breves días” (1992), que mereció el Premio Nacional de Poesía otorgado por Colcultura, y “Pequeño reino” (1998). También, “Espacios en blanco” (2000) y “Hasta el fin de los números” (2012) evidencian su habilidad para explorar la riqueza del lenguaje y su dedicación a la precisión verbal.
Los críticos han resaltado la singularidad de la poesía de Garcés. Rodrigo Zuleta, crítico colombiano, destaca su habilidad para llegar a un límite en el que las palabras dejan de ser suficientes, invitando al lector a percibir el silencio que yace detrás de ellas. Jorge Cadavid, poeta y profesor colombiano, elogia la música subyacente en sus versos, que va más allá de lo conocido, explorando la esencia misma de lo nombrado.
Edgar O’Hara, crítico peruano, sitúa a Garcés en la tradición de la oposición a la verborrea, apreciando su afinidad con poetas de diversas latitudes, desde William Carlos Williams hasta la poesía japonesa y china. Por su parte, Luis Germán Sierra, poeta y crítico colombiano, resalta la temática de la amistad y la autenticidad que atraviesa la obra de Garcés, destacando su cercanía a la esencia de la poesía.
Garcés, a lo largo de su prolífica carrera, ha demostrado ser un virtuoso de la palabra, un explorador incansable de la música verbal y un crítico perspicaz de la condición humana. Su legado literario continúa inspirando a generaciones de lectores y escritores, y su influencia perdurará en el tejido cultural de Colombia y más allá.