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Poesía de Estados Unidos

Poemas de Denis Johnson

Denis Hale Johnson (1 de julio, 1949 – 24 de mayo, 2017) fue un prolífico escritor estadounidense cuya influencia y legado resuenan en la literatura contemporánea. Reconocido por su talento versátil, Johnson dejó su huella en cuentos, novelas, poesía y obras de teatro, brindando a la literatura una profundidad y un alcance únicos.

Nacido en Múnich, República Federal Alemana, en 1949, Denis Johnson se embarcó en un viaje literario que lo llevó desde su título en Bellas Artes otorgado por el Iowa Writers’ Workshop de la Universidad de Iowa hasta ser un influyente educador. Enseñó en su alma mater y compartió sus conocimientos con futuros escritores. Fue galardonado con el prestigioso premio Whiting Writer’s Award en 1986 y la Lannan Fellowship in Fiction en 1993, destacando su impacto en la comunidad literaria.

La carrera de Johnson despegó con la publicación de su icónica colección de relatos “Jesus’ Son” (1992), la cual posteriormente fue adaptada en una película que atrajo la atención de los críticos y el público. Esta obra consolidó su lugar como un narrador excepcionalmente hábil y valiente. Más allá de su destreza en la prosa, Johnson también exploró las posibilidades de la dramaturgia, con sus obras presentadas en escenarios de San Francisco, Chicago, Nueva York y Seattle. Como dramaturgo residente en Campo Santo, la compañía de teatro de Intersection for the Arts en San Francisco, dejó una huella indeleble en la escena teatral.

Durante su carrera, Johnson incursionó en géneros diversos, desafiando las fronteras literarias. Su novela “Árbol de humo” (2007) fue un hito en su trayectoria y le valió el prestigioso National Book Award, reconociendo su capacidad para cautivar a los lectores con su narración intrigante y su mirada única sobre el mundo.

No solo fue un maestro en la literatura, sino también en la vida. Johnson experimentó el amor, la pérdida y la evolución personal a través de sus relaciones matrimoniales y la crianza de sus tres hijos. Su perspectiva sobre la educación en el hogar quedó inmortalizada en un artículo que escribió para Salon.com en 1997, demostrando su compromiso con la reflexión y el diálogo en temas importantes.

Denis Hale Johnson trascendió la literatura contemporánea, influyendo en escritores como Chuck Palahniuk y Scott Snyder. Su voz única y su capacidad para explorar lo humano en todas sus complejidades dejaron una marca imborrable en la literatura y en aquellos que lo admiraron y fueron inspirados por su trabajo. Su legado persiste como un faro de creatividad y profundidad en el vasto océano literario.

Blancos de cuello blanco

Trabajamos en este edificio y somos espantosos
en la luz fluorescente, se sabe, nuestras ropas
despertaron esta mañana y nos tragaron como alhajas
y van los ascensores arriba y abajo, llenos de nosotros,
yendo y volviendo como el rocío de luz que va
alrededor de las salas entre los chalados por el baile.
Mi oficina huele como una teoría, pero aquí se llora
por ver a la bondad del mundo develada
y alzándose con el gobierno de sus labios,
el alfabeto cuajándose en el aire
alrededor de nuestras cabezas. Pero en las flamas de mi vientre
alguien baila, llamándome por muchos nombres secretos y llenos de luz
que se alzan y rompen, y veo mis vidas pasadas.

Pasajeros

El mundo estallará como un intestino al sol,
lo oscuro se volverá granito y el granito un nombre,
pero siempre habrá alguien montando en autobús
por las encrucijadas regadas con vidrios rotos
entre las mujeres sin palabras que golpean a sus niños;
siempre un lento alfabeto de lluvia
hablando de naufragar y perecer en el aire,
siempre estas definitivas cárceles de luz en el cielo
en la boda entre la claridad y la tormenta
y una mujer que se vuelve y revuelve su cabello
en un lánguido vuelo, viajando entre marcos y marcos de memoria,
donde la cara del pasado se convierte en chispas esmeriladas,
para abrir así su gracia y su increíble daño
sobre mi vida, y nunca voy a morir.

Vísperas

Las toallas se pudren y me da asco
esta húmeda península donde inventaron la niebla
y el abuso de drogas, y donde enseñaron a la luz a desvanecerse,
donde mi corazón barato y de calidad suprema llora
porque nunca besaré otra vez tus famosas rodillas
en un cuarto que se ha hecho difuso
al tirar una pañoleta sobre la lámpara.
Las cosas se ponen se ponen radicales en lo oscuro:
los veleros en la ensenada zarpan,
la provincias de la actualidad gatean sobre el mar.
Ahora, el crepúsculo pastorea con ternura
rumbo a los parqueaderos agotados.
La puesta de sol instantánea en los parachoques,
la memoria y la paz …. el asidero del caos …