El tercer hombre

“El Tercer Hombre” (1949), dirigida por Carol Reed y basada en la novela homónima de Graham Greene, es una obra maestra del cine noir que trasciende las fronteras del género y se erige como un clásico atemporal del séptimo arte. Ambientada en los comienzos de la Guerra Fría, en la Viena de 1947, la película nos introduce en un mundo dividido por la ocupación de las potencias aliadas tras la Segunda Guerra Mundial.

El protagonista, Holly Martins, interpretado magistralmente por Joseph Cotten, es un escritor de novelas del Oeste que llega a Viena con la esperanza de reunirse con su antiguo amigo de la infancia, Harry Lime. Sin embargo, su llegada coincide con el misterioso atropello y muerte de Lime en plena calle. Lo que podría haber sido una simple historia de detectives se convierte en un intrincado thriller cuando Holly descubre que su amigo Harry estaba involucrado en el mercado negro.

La narrativa de la película se teje con maestría, y la cinematografía en blanco y negro de Robert Krasker crea una atmósfera sombría y evocativa que envuelve al espectador. La música de Anton Karas, con su inconfundible cítara, se convierte en otro personaje en sí misma, proporcionando un contrapunto melódico a la oscuridad de la trama.

Uno de los elementos más notables de “El Tercer Hombre” es su capacidad para explorar temas profundos en medio de la intriga. La película cuestiona la moralidad en tiempos de crisis, la lealtad hacia los amigos y los dilemas éticos que surgen en un mundo postguerra. El personaje de Harry Lime, interpretado magistralmente por Orson Welles, es un arquetipo de la ambigüedad moral y la corrupción, un ser encantador pero peligroso que plantea preguntas incómodas sobre la naturaleza humana.

Graham Greene, autor de la novela en la que se basa la película, aporta su característico estilo literario a la trama. Su capacidad para explorar las complejidades de la condición humana se traduce de manera brillante en la pantalla grande a través del guion que él mismo adaptó para la película.

En resumen, “El Tercer Hombre” es una obra maestra del cine que perdura en el tiempo gracias a su intrigante trama, su rica caracterización de personajes y su reflexión sobre cuestiones morales y éticas. La colaboración entre Carol Reed, Graham Greene y un elenco talentoso da como resultado una película que sigue siendo un referente del cine noir y una experiencia cinematográfica inolvidable.