Riesgos de los viajes en el tiempo
Resumen del libro: "Riesgos de los viajes en el tiempo" de Joyce Carol Oates
En el Estado rígido y totalitario en el que tiene lugar esta historia, los viajes en el tiempo, tanto como sus peligros, son muy reales. Sin embargo, aquí no son el origen de divertidas aventuras, sino castigos del poder contra individuos subversivos.
Individuos como Adriane Strohl, aunque ella nunca hubiese sospechado ser una chica peligrosa. Después dar su discurso de graduación y a modo de «rehabilitación» por Traición y Cuestionamiento de la Autoridad, Adriane es enviada a Wainscotia, una ciudad que solo existía ochenta años antes, en 1959. Pero su idealismo no entiende de saltos temporales y no puede evitar cuestionar los principios que rigen su sociedad, con resultados liberadores…, pero también estremecedores.
Para Stig Björkman y para Charlie Gross
No hubiesen venido a buscarme, pero, ingenuamente, hice que se fijaran en mí. Me atreví, adrede, a hacer lo que no tenía que haber hecho.
Utilicé mi libre albedrío pero con un cálculo erróneo. O, más bien, sin calcular: sin pensar. Por vanidad y estupidez; y ahora estoy perdida.
A veces, de rodillas, en una postura de oración, soy capaz de atravesar la «barrera del censor»… Soy capaz de recordar…
¡Pero me duele tanto la cabeza! Es un esfuerzo titánico: algo así como luchar contra la gravedad en Júpiter.
Por mi condición de Exiliada tengo prohibido hablar con nadie de mi sentencia o de mi vida antes del Exilio, así pues mi soledad es doble.
Aunque pocas veces me falta compañía en este sitio extraño, me siento muy sola y no estoy segura de poder perseverar.
Mi condena es de «solo» cuatro años. Podría haber sido «perpetua».
O podría haber sido Aniquilación.
De rodillas noche tras noche, mientras me esfuerzo por recordar, por recuperar mi antiguo yo, perdido, trato de sentirme agradecida por que mi condena no haya sido Aniquilación.
Y también trato de agradecer que no detuvieran además a alguien de mi familia como colaborador/facilitador de la Traición.
I. Primera de la clase
Las Instrucciones
- En la Zona Restringida, al Individuo Exiliado (IE) se le permite un radio máximo de desplazamiento de quince kilómetros, con epicentro en su residencia oficial. Esa residencia solo se puede cambiar mediante recurso ante la Oficina Disciplinaria de la Seguridad Nacional en el Exilio (ODSNE).
- Al IE se le prohíbe cuestionar, impugnar o desobedecer en modo alguno a cualquier autoridad local de la Zona Restringida. Al IE se le prohíbe identificarse, excepto de la manera establecida por la ODSNE. Al IE se le prohíbe proporcionar «conocimiento del futuro» en la Zona Restringida o buscar o tratar de localizar «parentela».
- Al IE se le proporcionará un nombre nuevo, que es innegociable, y una «partida de nacimiento» apropiada.
- Al IE se le prohíbe iniciar relaciones «íntimas» o «confidenciales» con ningún otro individuo. Se le prohíbe igualmente procrear.
- Al IE se le identificará como «adoptado» por unos «padres adoptivos» que ya habrán «fallecido». Al IE se le identificará como desprovisto de cualquier otro familiar. Esa información constará en su registro oficial en la Zona Restringida.
- Al IE se le vigilará en todo momento durante su Exilio. Queda entendido que la ODSNE puede revocar en cualquier instante los términos del Exilio y de la condena.
- El incumplimiento de cualquiera de estas Instrucciones por parte del IE se traducirá en su Aniquilación inmediata.
…
Joyce Carol Oates. Escritora americana, se licenció en Lengua y Literatura Inglesa por la Universidad de Syracuse, consiguiendo más tarde un doctorado en la Universidad de Rice, y obtuvo un master en la de Wisconsin-Madison.
Oates publicó su primera novela en 1964, y fue profesora en la Universidad de Detroit. Marchó a Canadá, en donde también fue profesora, esta vez en la Universidad de Windsor, en Ontario, y allí fundó junto a su marido, también profesor universitario, una editorial. En 1978, Oates regresó a Estados Unidos, ejerciendo como profesora de Escritura Creativa en la Universidad de Princeton. En 1970, obtuvo el Nacional Book Award, y es miembro de la Academia Americana de las Artes y las Letras.
Es autora de cuentos, relatos cortos, teatro, ensayos, poemas, libros juveniles e infantiles y especialmente novelas, algunas de las cuales las ha firmado con los seudónimos de Rosamond Smith y Lauren Kelly.
De entre su obra habría que destacar títulos como Qué fue de los Mulvaney, Monstruo de ojos verdes, La hija del sepulturero, Bestias o Una hermosa doncella, entre otros.
Su nombre ha sido propuesto en varias ocasiones para el Nobel de literatura y también llegó a ser finalista del Pulitzer en 1992 por su obra Agua Negra.