Gamiani o dos noches de pasión
Resumen del libro: "Gamiani o dos noches de pasión" de Alfred de Musset
Si bien Musset, ya en algunas de sus composiciones teatrales, mostrara sus facultades para la literatura galante, nunca como en Gamiani reveló el secreto de sus más íntimas y ocultas obsesiones. Puede decirse que el personaje de la condesa Gamiani es el mismo Musset en su vertiente femenina : apasionada, voluptuosa, dominante y posesiva.
Primera noche
Era ya media noche. En los lujosos salones de la condesa Gamiani, resplandecientes y perfumados, danzaban las juveniles parejas a los acordes de una mágica orquesta.
Las refulgentes joyas aumentaban el encanto de los elegantes trajes de variados colores.
Encantadora, graciosa, desvivíase la condesa por atender a todos sus invitados, y en su interesante rostro se traslucía la alegría que saboreaba gozosa por el éxito de la fiesta. Por todas las felicitaciones y para todos los cumplidos galantes tenía la dama una sonrisa, pregonera de su júbilo.
Yo, reducido, como siempre, a mi papel de frío observador, había notado varios detalles que me impedían ver en la condesa todos los méritos que le ponderaban sus ciegos admiradores.
No fue para mí labor difícil aquilatar su valía de mujer de mundo; pero deseaba conocer íntimamente a Gamiani, analizando con el escalpelo de mi razón su ser moral.
Confieso que una fuerza misteriosa parecía estorbar este propósito y sentía como vergüenza de aquel empeño de descubrir el misterio de la vida de aquella mujer enigmática y extraña.
Joven aún, inmensamente rica, bella, sin familia y con pocos amigos verdaderos, Gamiani podía considerarse como un caso raro en la sociedad elegante en que vivía.
Ciertas particularidades de la extraña vida de la condesa eran comentadas con explicable malicia.
Juzgábanla unos mujer fría y sin pasiones; teníanla otros por artista y desengañada de la vida, resuelta a frenar sus sentimientos y sus pasiones para ahorrarse nuevas amarguras.
Me propuse conocer el secreto de aquella vida; pero nada conseguí.
Aburrido, cansado del mal éxito de mis observaciones, estaba ya a punto de abandonar aquella empresa, cuando la casualidad vino en mi auxilio.
Un viejo libertino que asistía a la fiesta, dijo con cierto desdén, refiriéndose a Gamiani, que pasaba por nuestro lado:
—Es una sacerdotisa de Safo.
…
Alfred de Musset. Louis-Charles-Alfred de Musset, un destacado escritor y dramaturgo francés, nació el 11 de diciembre de 1810 en París y dejó una huella indeleble en la literatura del romanticismo. Desde una edad temprana, Musset demostró un talento excepcional, destacándose en el colegio Enrique IV, donde obtuvo el premio de disertación literaria en 1827. Su educación lo llevó a explorar campos tan diversos como la medicina, el derecho, el dibujo, el inglés y el piano, pero su verdadera pasión siempre fue la literatura.
Alrededor de los 20 años, Musset se convirtió en uno de los primeros escritores en adoptar la estética romántica, lo que marcó el comienzo de una destacada carrera literaria. Sin embargo, su notoriedad literaria estuvo acompañada de una reputación controvertida, que solo se amplificó debido a su imagen de dandi. En el ámbito personal, mantuvo una apasionada relación con la novelista George Sand entre 1833 y 1835.
Musset también desempeñó roles importantes como bibliotecario en el Ministerio del Interior durante la Monarquía de Julio, y posteriormente en el Ministerio de Instrucción Pública durante el Segundo Imperio. Su contribución a la literatura incluye una serie de obras notables, como "Cuentos de España e Italia," "Rolla," y "Las cuatro Noches," que se recopilaron en el volumen "Poesías nuevas." Además, incursionó en la dramaturgia con piezas como "Lorenzaccio," "Fantasio," y "La noche veneciana."
Musset también dejó su marca en la narrativa, con obras como "La confesión de un hijo del siglo" y "Gamiani: dos noches de placer." Su legado en la literatura erótica es significativo.
Alfred de Musset, reconocido con la Legión de Honor en 1845 y miembro de la Academia Francesa en 1852, es un autor que ha perdurado a lo largo del tiempo gracias a su creatividad, su espontaneidad y su gracia características. Su influencia en la literatura y el romanticismo francés es innegable, y su legado literario sigue siendo una fuente de inspiración para generaciones de lectores y escritores.