Fahrenheit 451
Resumen del libro: "Fahrenheit 451" de Ray Bradbury
Fahrenheit 451: la temperatura a la que el papel se enciende y arde, es una obra maestra de la ciencia ficción escrita por Ray Bradbury. En este inquietante relato, Bradbury nos transporta a un futuro distópico donde los libros están prohibidos y los bomberos tienen la función opuesta a la que conocemos: en lugar de apagar incendios, se encargan de provocarlos. El protagonista, Guy Montag, es uno de estos bomberos cuyo trabajo consiste en quemar libros, considerados peligrosos por su capacidad de generar discordia y sufrimiento.
Montag lleva una vida aparentemente satisfactoria hasta que conoce a Clarisse, una joven que le hace cuestionar su existencia y el propósito de su trabajo. A medida que se sumerge en el mundo de los libros prohibidos, Montag empieza a experimentar una metamorfosis personal que lo lleva a enfrentarse al sistema opresivo en el que vive. El Departamento de Incendios, con su imponente Sabueso Mecánico y los omnipresentes helicópteros, está siempre listo para perseguir a aquellos que desafían la ley y se aferran al conocimiento prohibido.
Bradbury dibuja un cuadro sombrío de una civilización occidental esclavizada por los medios de comunicación, los tranquilizantes y el conformismo. Su visión profética incluye elementos sorprendentemente similares a nuestra realidad actual: pantallas de televisión gigantes que llenan las paredes con contenido interactivo, carreteras donde los autos corren a velocidades vertiginosas y una sociedad que se sumerge en una corriente constante de música y noticias transmitidas por diminutos auriculares.
El autor, Ray Bradbury, nacido en 1920, es una figura destacada en la literatura de ciencia ficción. Su habilidad para entrelazar críticas sociales con narrativas cautivadoras lo ha consagrado como uno de los grandes visionarios del siglo XX. Además de “Fahrenheit 451”, Bradbury es conocido por su vasta producción literaria, que incluye cuentos, novelas, obras de teatro y ensayos, todos caracterizados por su estilo lírico y su profunda exploración de la condición humana.
Fahrenheit 451 no solo es un retrato aterrador de un futuro potencial, sino también una advertencia sobre los peligros de la censura y la complacencia. Bradbury nos desafía a valorar y defender el conocimiento y la libertad de pensamiento en un mundo que podría fácilmente sucumbir a la oscuridad de la ignorancia y el control autoritario. Este libro es, sin duda, una lectura imprescindible para quienes buscan comprender las complejidades de nuestra sociedad y el valor incalculable de los libros y las ideas.
Prefacio
Fuego brillante
Cinco pequeños brincos y luego un gran salto.
Cinco petardos y luego una explosión.
Eso describe poco más o menos la génesis de Fahrenheit 451.
Cinco cuentos cortos, escritos durante un período de dos o tres años, hicieron que invirtiera nueve dólares y medio en monedas de diez centavos en alquilar una máquina de escribir en el sótano de una biblioteca, y acabara la novela corta en sólo nueve días.
¿Cómo es eso?
Primero, los saltitos, los petardos:
En un cuento corto, «Bonfire», que nunca vendí a ninguna revista, imaginé los pensamientos literarios de un hombre en la noche anterior al fin del mundo. Escribí unos cuantos relatos parecidos hace unos cuarenta y cinco años, no como una predicción, sino como una advertencia, en ocasiones demasiado insistente. En «Bonfire», mi héroe enumera sus grandes pasiones. Algunas dicen así:
«Lo que más molestaba a William Peterson era Shakespeare y Platón y Aristóteles y Jonathan Swift y William Faulkner, y los poemas de, bueno, Robert Frost, quizá, y John Donne y Robert Herrick. Todos arrojados a la Hoguera. Después imaginó las cenizas (porque en eso se convertirían). Pensó en las esculturas colosales de Michelangelo, y en el Greco y Renoir y en tantos otros. Mañana estarían todos muertos, Shakespeare y Frost junto con Huxley, Picasso, Swift y Beethoven, toda aquella extraordinaria biblioteca y el bastante común propietario…».
No mucho después de «Bonfire» escribí un cuento más imaginativo, pienso, sobre el futuro próximo, «Bright Phoenix»: el patriota fanático local amenaza al bibliotecario del pueblo a propósito de unos cuantos miles de libros condenados a la hoguera. Cuando los incendiarios llegan para rociar los volúmenes con queroseno, el bibliotecario los invita a entrar, y en lugar de defenderse, utiliza contra ellos armas bastante sutiles y absolutamente obvias. Mientras recorremos la biblioteca y encontramos a los lectores que la habitan, se hace evidente que detrás de los ojos y entre las orejas de todos hay más de lo que podría imaginarse. Mientras quema los libros en el césped del jardín de la biblioteca, el Censor Jefe toma café con el bibliotecario del pueblo y habla con un camarero del bar de enfrente, que viene trayendo una jarra de humeante café.
…
Ray Bradbury. (1920-2012) Escritor americano, fue conocido por sus obras dedicadas a la ciencia ficción, el terror y la fantasía, siendo considerado uno de los grandes maestros del género fantástico del siglo XX. Bradbury nació en una familia humilde y no cursó estudios universitarios, completando su formación de manera autodidacta a través de bibliotecas públicas. De hecho, su amor por las bibliotecas se tradujo posteriormente en una defensa a ultranza del sistema de bibliotecas americanas.
Se inició joven en la escritura, con especial atención al relato corto, siendo publicado en numerosas revistas literarias. En 1940 publicó su primera antología Dark Carnival, a la que seguirán otras como Crónicas marcianas, obra que se hizo muy popular, sobre todo tras la adaptación que se hizo en los años 80 para la televisión.
Pero fue, sin duda, su obra distópica Farenheit 451 el detonante de su fama y éxito, gracias a la excelente versión de François Truffaut que se convirtió en todo un clásico cinematográfico. Otras obras de Bradbury que fueron adaptadas fueron El hombre ilustrado, El carnaval de las tinieblas o El sonido del trueno.
A lo largo de su carrera, Bradbury recibió premios como el Seiun, el Locus, el World Fantasy Award, el Saturn, el Stoker, el Reino de Redonda o el Retro Hugo a la mejor novela de 1953 por Farenheit 451.