El secreto de Lena
Resumen del libro: "El secreto de Lena" de Michael Ende
El secreto de Lena es una novela de fantasía escrita por el autor alemán Michael Ende, publicada en 1986. La historia narra las aventuras de Lena, una niña de doce años que vive en un mundo gris y aburrido, hasta que un día descubre un libro mágico que le permite viajar a otros mundos llenos de color y maravillas. El libro se llama El secreto de Lena, y es el mismo que el lector tiene en sus manos.
La novela es una obra maestra de la literatura infantil y juvenil, que combina elementos de cuento de hadas, mitología, ciencia ficción y metaficción. El estilo de Ende es fluido y poético, capaz de crear imágenes vívidas y emocionantes con sus palabras. Los personajes son entrañables y complejos, cada uno con su propia personalidad y motivaciones. La trama es original y sorprendente, llena de giros y misterios que mantienen el interés del lector hasta el final.
El secreto de Lena es un libro que invita a la reflexión sobre temas como la identidad, la imaginación, la libertad, la responsabilidad y el amor. También es un homenaje a la literatura y al poder de los libros para transformar la realidad y abrir las puertas a otros mundos posibles. Es una novela que se puede disfrutar a cualquier edad, y que deja una huella imborrable en el corazón de quien la lee.
Lena era una niña extremadamente amable siempre que sus padres se portaran bien y obedecieran a lo que ella les mandaba.
Desgraciadamente, eso ocurría pocas veces.
La niña —su verdadero nombre era Elena— decía a su padre:
—Dame cinco marcos para que me pueda comprar un helado de los grandes.
Pero él contestaba:
—No, ya te has comido tres, y con tanto helado te va a doler el estómago.
Otras veces, Lena le decía a su madre de la mejor de las maneras:
—Mamá, ¡hazme el favor de limpiarme los zapatos!
Pero ella respondía:
—Eres lo bastante mayor para hacértelo tú sola.
Y cuando Lena anunció:
—He decidido que este año iremos de vacaciones a la playa.
Los dos contestaron a dúo:
—Preferimos ir a la montaña.
Lena se dio cuenta de que las cosas no podían continuar así. Por eso, decidió ir en busca de un hada. Le daba igual que fuera buena o mala. Lo realmente importante era que supiera hacer magia. Pero ¿dónde encontrar en una gran ciudad un hada de verdad, así como así?
No era nada fácil.
La niña corrió por un montón de calles y descifró con esfuerzo —estaba aprendiendo a leer— los nombres que había en las tiendas y en los portales. Ponía, por ejemplo: «1×2» o «FRUTAS TROPICALES» o «DENTISTA» o «ABOGADO» o «MASAJISTA DIPLOMADA» o «SEGUROS LA AURORA», pero no ponía «HADA» por ningún sitio.
En la esquina de una calle se encontró con un guardia que en ese mismo momento estaba poniendo una multa a un coche mal aparcado.
Lena se acercó y le preguntó:
—¿Tendría la amabilidad de decirme dónde puedo encontrar un hada de verdad?
—¿Una limonada de verdad? —preguntó, distraído, el guardia mientras continuaba escribiendo.
—No, un hada; una que sea capaz de hacer magia —aclaró Lena.
—¡Ah, un hada que haga magia! —dijo el guardia—. Espera un momento.
Terminó de escribir, colocó la multa detrás del limpiaparabrisas, sacó un librito de su cartera y comenzó a hojearlo mientras murmuraba:
…
Michael Ende. Fue uno de los escritores más importantes de literatura fatástica y de ficción infantil y juvenil del S.XX. Nació en Alemania en 1929, su padre, Edgar Ende, era un reconocido pintor surrealista prohibido por el partido Nazi. La obra de su padre, así como el barrio de Munich donde se crio, rodeado de pintores y otros artistas, determinó el rico estilo que más tarde desarrollaría.
Desertor del ejército nazi, luchó en un grupo antifascista durante la Segunda Guerra Mundial. Pese a querer ser dramaturgo, Ende acaba estudiando como actor mientras sigue desarrollando sus primeras obras, normalmente obras de carácter político.
El éxito le llega con Jim Botón y Lucas el maquinista (1962), una obra infantil de marcado corte fantástico que logra una gran repercusión y un rechazo frontal de la crítica literaria, anclada en la corriente realista que dominaba en Alemania desde la guerra.
Harto del ambiente generado a su alrededor, Ende se muda a las afuera de Roma, donde escribe obras como Momo (1973), ganadora del Premio de Literatura Juvenil en Alemania, y que suponen un espaldarazo para su carrera. En 1982 publica La historia interminable, una obra también juvenil que supera todas las expectativas editoriales y se traduce a más de cuarenta idiomas. Posteriormente se realizaría una adaptación del libro a la pantalla grande, pese a las protestas de Ende que intentó desvincularse por completo del proyecto.
Aunque es más conocido por sus libros de género juvenil, también publicó varios libros para adultos y numerosas obras de teatro, poesía o ensayos. Sus obras se caracterizan por la fantasía y el surrealismo, al igual que por los llamativos y extraños nombres que el autor les proporcionó.
Michael Ende murió en Stuttgart, Alemania, en 1995, debido a un cáncer de estómago diagnosticado tres años antes.
En 1998 se inauguró en Alemania el Michael Ende Museum, donde se pueden consultar sus obras en diferentes idiomas, escritos, parte de su biblioteca privada, entre otras pertenencias del escritor.