Putas asesinas
Roberto Bolaño
En «Últimos atardeceres en la tierra» se narra un viaje a Acapulco que se convierte paulatinamente en un descenso a los infiernos. En «Dentista» se cuenta la historia de un adolescente misterioso y dos adultos, ya de vuelta de todo, que lo observan desde un precipicio. En «Buba» se cuenta una historia de fútbol en tres partes: la de un futbolista sudamericano, la de un futbolista africano y la de uno español, y la sorprendente historia de su equipo, que bien podría ser el Barcelona. En «Carnet de baile» se dan 69 razones para no bailar con Pablo Neruda. En «Prefiguración de Lalo Cura», por el contrario, nos sumerge en una historia de narcotraficantes y directores de cine porno, y «Fotos» nos trae una vez más a Arturo Belano, el protagonista de Los detectives salvajes.
En el gran ecbó
Guillermo Cabrera Infante
LLOVÍA. La lluvia caía con estrépito por entre las columnas viejas y carcomidas. Estaban sentados y él miraba al mantel. —¿Qué van a comer? —preguntó el camarero...
Delito por bailar el chachachá
Guillermo Cabrera Infante
«Los tres cuentos de este libro están hechos de recuerdos. Dos ocurren en el apogeo del bolero, el tercero después de la caída en el abismo histórico. El tiempo es por supuesto diverso, pero el espacio, la geografía (o si se quiere, la topografía: todos los caminos conducen al amor) es la misma. Los personajes son intercambiables, pero en el tercer cuento el hombre es mas decisivo que la mujer en la única narración en primera persona, que no lo parece. A pesar de que sus reflexiones —mirándose vivir en un espejo dialéctico— son todas literarias o referidas a un solo libro. La ciudad es siempre la misma. ¿Tengo que decir que se llama La Habana?» Guillermo Cabrera Infante
La marea es puntual
Siegfried Lenz
Primero apareció el marido. Lo vio salir, solo, de la casa baja techada de caña detrás del dique, el gigante de rostro triste. Llevaba sus altas botas impermeables de siempre y la chaqueta gruesa con el cuello de piel. Desde la ventana observó cómo se lo subía...
Navidad en los Andes
Ciro Alegría
Marcabal Grande, hacienda de mi familia, queda en una de las postreras estribaciones de los Andes, lindando con el río Marañón. Compónenla cerros enhiestos y valles profundos. Las frías alturas azulean de rocas desnudas. Las faldas y llanadas propicias verdean de sembríos, donde hay gente que labre, pues lo demás es soledad de naturaleza silvestre...
Cabeza rapada
Jesús Fernández Santos
Era un viento templado. Las hojas volaban llenando la calzada, remontándose hasta caer de nuevo desde las copas de los árboles. Su cabeza rapada al cero, aparecía oscura del sudor y el sol, como las piernas con sus largos pantalones de pana. No había cumplido los diez años; era un chico pequeño...
Un destripador de antaño
Emilia Pardo Bazán
"Un destripador de antaño" es una novela escrita por Emilia Pardo Bazán y publicada en 1913. La trama se desarrolla en la ciudad de Madrid en la que una serie de asesinatos sacuden a los barrios más pobres de la ciudad. El inspector Cárdenas es el encargado de investigar los crímenes y se enfrenta a una lucha por resolver el caso, mientras lucha contra su propia salud física y emocional. La novela es una crítica social de la época en la que fue escrita, abordando temas como la desigualdad social, la pobreza y la marginación. Además, Pardo Bazán utiliza la novela para explorar temas como la justicia, la moralidad y la ley. A lo largo de la historia, el inspector Cárdenas lucha por hacer justicia mientras se enfrenta a la corrupción y la falta de voluntad por parte de los poderosos de la ciudad. Pardo Bazán es una de las figuras más importantes de la literatura española del siglo XIX y principios del XX. Sus obras están profundamente comprometidas con…
La noche que lo dejaron solo
Juan Rulfo
-¿Por qué van tan despacio? -les preguntó Feliciano Ruelas a los de adelante-. Así acabaremos por dormirnos. ¿Acaso no les urge llegar pronto? -Llegaremos mañana amaneciendo -le contestaron...
El joven Arquímedes
Aldous Huxley
Aldous Huxley (1894-1963) no es sólo el singularísimo autor de Viejo muere el cisne, creador de una nueva fórmula novelesca; es también, en cuanto narrador, y aparte de sus ensayos, biografías y libros de viaje, un admirable cuentista. Ducho en todas las dimensiones de la ficción, se mueve con pareja maestría tanto en los espacios abiertos de la gran novela como en los más exiguos de la nouvelle. Acierta del mismo modo al presentar una acción fraccionada, vista en cortes transversales, yendo y viniendo a través del tiempo, como en «El joven Arquímedes», y otros tres apasionantes relatos, de ritmo seguido y progresión continua.
Las inseparables
Simone de Beauvoir
Escrita en 1954, cinco años después de la publicación de El segundo sexo, Las inseparables narra la amistad apasionada que une a Sylvie y a Andrée -alter ego de la propia Simone de Beauvoir y de Élisabeth Lacoin (Zaza)- desde que con nueve años se conocen en la escuela. Andrée es alegre, inteligente y atrevida, y Sylvie, una niña formal que se siente irremediablemente atraída por su personalidad arrolladora. Juntas aprenderán a librarse de las convenciones y las expectativas asfixiantes de su entorno, ignorantes del trágico precio que tienen la libertad y la ambición intelectual y existencial. Una historia catártica para la autora, tal vez demasiado reveladora para publicarla en vida, cuya recuperación -junto con algunas fotografías y cartas que sirven de testimonio- constituye un acontecimiento literario.
Cuentos judíos
Leopold von Sacher-Masoch
Los Cuentos judíos de Leopold von Sacher-Masoch muestran la simpatía que el autor sentía por el pueblo judío y su solidaridad ante la persecución de que era objeto. Ambientados en casi todos los países europeos, en especial la región polaca de Galitzia, estos cuentos amables reflejan con nostalgia el mundo perdido de las idílicas comunidades rurales judías —y también algunas urbanas— que el industrialismo de la segunda mitad del siglo XIX había destruido.
Cuentos románticos
Justo Sierra
Los Cuentos románticos de Justo Sierra abren una nueva época literaria en México. «Justo pensó, habló y escribió como no escribían, ni hablaban, ni pensaban sus contemporáneos» —dice Hilarión Frías y Soto, quien lo conoció en El Renacimiento. Sin embargo, los cuentos no se editaron en libro hasta 1896, cuando aceptó recuperarlos de revistas y folletines para formar el volumen que tituló, entre nostálgico e irónico, Cuentos románticos. Y «en verdad —dice Raymundo Ramos en el prólogo de esta edición—, los cuentos de Sierra no sólo son románticos sino deliberadamente románticos», y por eso mismo también es posible hallar en ellos la huella de la prosa modernista (por él inaugurada), y una maestría de temas, de frases, de astucia narrativa, excepcional en su época y en su medio. (Esta edición de los Cuentos románticos de Justo Sierra busca asentar el recuerdo de que en 1998 se cumplieron 150 años del nacimiento de un gran humanista, de uno de los grandes maestros de México y América, y del fundador de la…
¿Quieres hacer el favor de callarte, por favor?
Raymond Carver
En ¿Quieres hacer el favor de callarte, por favor?, su primer libro de relatos, que escribió y reescribió a lo largo de quince años y que le supuso la consagración inmediata, Raymond Carver renovó la forma del relato breve hasta darle proporciones de haiku y sin que esta utilización radical de la elipsis le haga perder ninguna fuerza. Todo lo contrario, los relatos de Carver poseen, quizá precisamente por su mismo carácter fragmentario, una inesperada capacidad de provocar una impresión fortísima, una indeleble conmoción.
La vida por la opinión
Francisco Ayala
Esto no son cuentos. Ocurre que, por su carácter vehemente, o quizá por falta de experiencia cívica, los españoles han propendido siempre a tomar la política demasiado a pechos. La última guerra civil los dejó deshechos, orgullosísimos, y con la incómoda sensación de haber sufrido una burla sangrienta...
La fiesta de las balas
Martín Luis Guzmán
Atento a cuanto se decía de Villa y el villismo, y a cuanto veía a mi alrededor, a menudo me preguntaba yo en Ciudad Juárez qué hazañas serían las que pintaban más a fondo la División del Norte: si las que se suponían estrictamente históricas, o las que se calificaban de legendarias; si las que se contaban como algo visto dentro de la más escueta realidad, o las que traían ya tangibles, con el toque de la exaltación poética, las revelaciones esenciales...
Una belleza rusa
Vladimir Nabokov
En esta colección de trece cuentos Nabokov nos habla con ternura e ironía de una generación de exiliados. Algunos son emigrados rusos residentes en París o en Berlín, donde intentan reconstruir sus vidas a partir de fragmentos de realidad, belleza y honores recordados. Otros son simplemente hombres y mujeres a la deriva en un mundo extraño donde han desaparecido los valores que una vez rigieron su existencia.
La aventura del padre Vicentio
Bret Harte
Una víspera de Año Nuevo, hace unos cuarenta años, el padre Vicentio, que venía de la Misión Dolores, seguía lentamente su camino a través de las arenosas colinas. Cuando trepaba por la cresta más elevada, cerca de la Misión Creek...
El don Juan
Benito Pérez Galdós
«Esta no se me escapa: no se me escapa, aunque se opongan a mi triunfo todas las potencias infernales», dije yo siguiéndola a algunos pasos de distancia, sin apartar de ella los ojos, sin cuidarme de su acompañante, sin pensar en los peligros que aquella aventura ofrecía...
Oficio de tinieblas
Alejo Carpentier
El año cobraba un mal aspecto. Muy pocos se daban cuenta de ello, pero la ciudad no era la misma. No estaba demostrado que los objetos pintaran en los pisos un cabal equivalente en sombras. Más aún: las sombras tenían una evidente propensión a quererse desprender de las cosas, como si las cosas tuvieran mala sombra...
Acuérdate
Juan Rulfo
Acuérdate de Urbano Gómez, hijo de don Urbano, nieto de Dimas, aquél que dirigía las pastorelas y que murió recitando el “rezonga ángel maldito” cuando la época de la gripe. De esto hace ya años, quizá quince. Pero te debes acordar de él...
El niño de junto al cielo
Enrique Congrains
Por alguna desconocida razón, Esteban había llegado al lugar exacto, precisamente al único lugar… Pero ¿no sería, más bien, que “aquello” había venido hacia él? Bajó la vista y volvió a mirar. Sí, ahí seguía el billete anaranjado, junto a sus pies, junto a su vida...
Cristina, hija de Lavrans
Sigrid Undset
Obra cumbre de la escritora noruega Sigrid Undset (1882-1949), Cristina, hija de Lavrans está considerada la mejor novela histórica del siglo XX. Premio Nobel de Literatura 1928. Narra la vida de Cristina, una joven inmersa en un mundo de pasiones y desesperanzas. Ambientada en la Noruega del siglo XIV, la obra recoge a tra vés de un variado elenco de personajes un paisaje donde la fe aún convive con los restos de las costumbre paganas. Este libro recoge las tres partes de las que se compone la novela y que fueron editadas originalmente en forma separada: 1. La Corona 2. La Mujer 3. La Cruz
Punin y Baburin
Iván Turguénev
Esta novela es una de sus obras maestras y es también uno de sus textos más autobiográficos, ya que se basa en su cruel madre y en su abuso de los cinco mil campesinos que poseía. Ella tenía un poder absoluto sobre ellos y, cuando se disgustaba, les infligía severos castigos, incluso flagelándolos hasta la muerte. Algunos críticos han teorizado sobre si las historias de Turguénev no eran en realidad instrumentos para liberar a los siervos, pues consiguen poner luz en las tinieblas de su tiempo.
Los perezosos
Charles Dickens, Wilkie Collins
En 1857, Charles Dickens y Wilkie Collins se pusieron a escribir una historia a cuatro manos. El resultado fue esta divertida novela protagonizada por dos profesionales del ocio, dos amigos cuya holgazanería constituye un paradójico acto de rebeldía en una Inglaterra victoriana que ensalzaba la diligencia y la productividad como virtudes rectoras. Como el Bartleby de Herman Melville, el dúo cómico formado por Thomas Idle y Francis Goodchild preferiría no hacer nada, o al menos nada que comporte un esfuerzo demasiado oneroso. Aun así, hilarantes aunque modestas aventuras les salen al paso en sus viajes por los pueblos de Inglaterra. La ascensión de una montaña, un día en las carreras de caballos, un partido de críquet, un trayecto en ferrocarril o la visita a un balneario; hasta la actividad más anodina puede propiciar el encuentro con personajes pintorescos y situaciones disparatadas que acabarán por reafirmar a Thomas Idle en su resolución de «no volver a ser activo nunca más, bajo ningún pretexto y por todo el tiempo que le quedara…
Resaca
Guillermo Cabrera Infante
Llegaron de detrás del dagame, proyectados de pronto contra la copa del árbol, extenuados, con el sol del mediodía encarnizado sobre sus cabezas pajizas y el polvo también pajizo ascendiendo desde la loma hasta diluirse en el aire, más allá de ellos. Eran dos...
Tandy
Sherwood Anderson
¿Qué harías si un desconocido te pusiera un nombre y te dijera que debes ser una persona especial? Eso le ocurre a Tandy, una niña que vive con su padre agnóstico en un pueblo aislado. El nombre y las palabras del forastero la acompañarán toda su vida, mientras intenta encontrar su lugar y su propósito en un mundo que parece no tener sentido. Tandy es uno de los cuentos más conmovedores de Sherwood Anderson, el maestro del relato breve americano. Un cuento que explora los temas de la soledad, la fe y el destino con una prosa sencilla y profunda.
El hombre
Juan Rulfo
"Los pies del hombre se hundieron en la arena dejando una huella sin forma, como si fuera la pezuña de algún animal. Treparon sobre las piedras, engarruñándose al sentir la inclinación de la subida; luego caminaron hacia arriba, buscando el horizonte..."
Balada de plomo y yerro
Guillermo Cabrera Infante
"El Buick, negro, acortó la marcha y rodó una o dos cuadras más, hasta parquear sin ruido bajo un laurel que ocultaba el farol de la esquina y su luz..."
El encuentro
Jesús Díaz
"—Chino —te grito—. ¡Chino! ¿No me oyes? ¿No quieres oírme? Eso ya no te lo grito, sólo te lo pienso. No te lo grito porque sé —desde hace un rato— que no quieres oírme. Lo sé desde que me gritaste..."
Los pazos de Ulloa
Emilia Pardo Bazán
La acción está ambientada en Ulloa, agreste región de Galicia, alrededor de 1866. El joven y recién ordenado sacerdote Julián Álvarez llega como capellán al poblado de Los Pazos, donde se levanta el castillo perteneciente a don Pedro Moscoso, de 30 años de edad, hombre licencioso, frívolo y desaprensivo, que ilegítimamente ostenta el título de marqués de Ulloa. En Los Pazos reina el más completo desorden y abandono. Los aldeanos roban impunemente al marquesado todo cuanto pueden. Quien verdaderamente manda y administra el solar es Primitivo, astuto labriego a las órdenes de don Pedro, que no ve con buenos ojos la llegada de Julián. La hermosa Isabel, hija de Primitivo, es la amante de don Pedro (y de cualquier campesino de los alrededores que la solicite), relación propiciada por su propio padre para tener así mayor dominio sobre el amo. De estos amores ilícitos ha nacido un niño, Perucho, de quien nadie se ocupa y por ello crece salvaje, sucio y solo. El sacerdote desaprueba tanto saqueo y libertinaje.