De Los Angeles Times - https://digital.library.ucla.edu/catalog/ark:/21198/zz002dj117, CC BY 4.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=143390854
Willard Huntington Wright. (1888-1939), escritor y crítico de arte norteamericano, mejor conocido por S. S. Van Dine, nació en Charlottesville, Va., siendo el mayor de los dos hijos de Archibald Davenport y Annie (Van Vranken) Wright. De origen holandés e inglés, sus ancestros se establecieron en América durante la época colonial.
Su padre, que había llegado a Charlottesville procedente de Louisa County, Va., era un hotelero; pronto la familia se trasladó a Lynchburg y luego a California. El joven Wright se educó durante un tiempo en el colegio de St. Vincent (más adelante Universidad Loyola), pero pronto pasó al de Pomona (1903-04) y luego a la Universidad del Sur de California, cerca de Los Angeles. En 1906 entró en Harvard, a la que abandonó para dedicarse al estudio del arte y la música en Munich y París.
A su regreso a California, se hizo crítico literario de Los Angeles Times (1907-13) y luego del Toiun Topics (1910-14), donde también fue crítico de teatro, hasta que por último se convirtió en director de la revista Smart Set. Con los editores de esta última, H. L. Mencken y George Jean Nathan, colaboró en Europe after 8:15, donde comentó la vida nocturna de las principales capitales europeas. Por entonces publicó un libro de poesía, Song of Youth, vivía en París y escribía catorce horas por día. Luego estalló la primera Guerra Mundial y se vio obligado a volver a los Estados Unidos, donde estuvo internado dos meses a causa que una crisis nerviosa.
Continuando su carrera literaria, Wright escribió un libro sobre Nietzsche, What Nietzsche Taught (1915), seguido de The Creative Will (1915), un estudio sobre estética. Su primera novela, The Man of Promise (1916), un lento análisis de la influencia de la mujer en un escritor, no tuvo mucho éxito, aunque cosechó algunos elogios por su fuerza y originalidad.
Los más importantes trabajos de entonces fueron, no obstante, en el campo del arte, como crítico de las revistas Forum, International Studio, San Francisco Bulletin, Hearst International Magaziney sus libros Modern Painting (1915) y The Future of Painting (1923), donde se distinguió por su apoyo a las nuevas formas del arte, sobre todo a la abstracción encabezada por los «sincromistas», una escuela de pintura fundada por su hermano, Stanton Macdonald-Wright, y Morgan Russell.
La segunda fase de su carrera como escritor comienza en 1923, cuando otra crisis emocional lo confinó a la cama. Su médico le prohibió la lectura, excepto novelas de intriga, que eran consideradas meramente relajantes. A causa de esto, leyó cientos de novelas, analizándolas, hasta que consideró que este nuevo género literario tenía una determinada técnica que él podía dominar. Así creo a su detective de ficción, Philo Vance y efectuó una sinopsis de 30 000 palabras de tres novelas, que envió a su agente literario, Maxwell Perkins, director de Scribners Sons, que había conocido en su etapa universitaria. Perkins, que había escrito que Wright «era ese tipo de hombre que nunca hace nada, pero cuando lo hace, lo hace condenadamente bien», aceptó las tres novelas: El misterioso caso Benson (1926), El crimen de la «Canaria» (1927) y La serie sangrienta (1928), que se convirtió en un best-seller. La siguiente, Los crímenes del «Obispo» (1929), superó todas las expectativas y Wright se hizo rico y famoso.
Los libros estaban firmados por «S. S. Van Dine», un seudónimo compuesto por la abreviatura de steamship (buque de vapor) y un viejo nombre familiar (Van Dyne), ya que Wright quería conservar su propio nombre para otras obras que él consideraba más «serias». Su erudito y sofisticado detective suele irritar la paciencia de los lectores, pero como Wright decía, «lo importante no es que les agrade Vance, sino que no puedan olvidarle». Vance es el personaje central de doce novelas, que como hemos dicho comienzan con El misterioso caso Benson y terminan con Crimen en la nieve (1939), cuya revisión final Van Dine no terminó nunca.
Wright murió en Nueva York a causa de una trombosis coronaria y sus cenizas fueron esparcidas desde un aeroplano sobre la ciudad.